Ya se ha escenificado lo que estaba cantado hace años, Jaime Mayor Oreja no encabezará las listas del Partido Popular en las próximas elecciones europeas.
Su futuro todavía es incierto, de momento no sabemos si continuará en el Partido Popular con otras responsabilidades, o se retirará definitivamente de la vida política; lo que sí sabemos es que es la política antiterrorista de Rajoy (la continuación de la política antiterrorista zapaterista) la que ha motivado su paso atrás.
Es decir, el terrorismo y las estrategias para acabarlo han distanciado a Mayor Oreja de Génova, igual que hace años la lucha antiterrorista separó a Rosa Díez de Ferraz.
Se nos ha querido vender la derrota de ETA y del terrorismo, no obstante Mayor Oreja acertadamente viene defendiendo la continuación del terrorismo por otros medios, a saber: la política.
Rajoy en un entreguismo incomprensible ha decidido continuar con la lucha antiterrorista del anterior gobierno socialista que en grandes líneas consiste en situar en el mismo plano óptico a las víctimas y los verdugos, y mirar a otra parte cuando se trata de la continuación de la misma lucha terrorista por otros medios aparentemente más pacíficos.
En noviembre pasado la opinión pública conoció del informe elaborado por la Guardia Civil en el que se constataba que uno de cada cuatro profesores de la red pública educativa del Reino de Navarra está vinculado con el entorno proetarra. No es novedoso recordar que una de las intenciones de Sortu es crear un modelo educativo propio para afianzar en la españolísima navarra lo que ellos denomina “conciencia nacional vasca”.
Hoy el terrorismo separa a miembros incuestionables en sus propios partidos (Jaime Mayor, Rosa Díez …), mañana el terrorismo volverá a separar a la sociedad civil que debidamente adoctrina se olvidará de su común herencia histórica, y concebirán nuevamente la lucha ideológica y la lucha armada como instrumentos útiles para la división de España.
Si no lo remedia nadie el terrorismo seguirá separando a la sociedad española durante mucho tiempo, y volverá a manifestarse en su cara más sanguinaria.
Autor: Carlos Pérez- Roldán Suanzes