Ante la sorpresiva abdicación de D Juan Carlos, Jefe del Estado a título de rey, el día 2 de junio de 2014, por medio del presente escrito, se quiere hacer constancia de lo siguiente:
1- Los Legitimistas Españoles, herederos de una Tradición plenamente Monárquica de más de dos siglos, formalmente erigidos en el Consejo Legitimista de las Españas, no aceptamos de ninguna manera la validez del reinado de D. Juan Carlos, así pues, tampoco la de su heredero D. Felipe.
2- Rechazamos la actitud de flagrante irresponsabilidad con la que D. Juan Carlos anuncia su decisión, siguiendo el hilo de sus antepasados Isabel y Alfonso, abandonando a la Patria cuando esta pasa por momentos críticos para el Pueblo. Con ésta, son ya tres las ocasiones a lo largo de la historia reciente que esta dinastía usurpadora deja a su suerte a España. Queda para su hijo un país desunido socialmente por la crisis económica y política, así como por las pretensiones separatistas de parte de sus territorios.
3- Otra vez, como en los tiempos de Isabel, para adoptar decisiones en caso de sucesión, se vuelve a incumplir la legislación vigente en esta materia, habiendo notificado la dimisión antes de que ésta estuviera regulada por el ordenamiento jurídico, actuando con la política de hechos consumados, y la complicidad de los partidos del poder, que tan bien han sabido aprovechar en el pasado, pero que rompe con la norma básica de que el primer obligado a cumplir la ley es el Rey.
4- Un Rey debe compartir el destino de su pueblo, como ya dijo D Carlos VII, «si el pueblo vive pobremente, vivan pobremente el Rey y sus ministros». Viendo el desarrollo de los acontecimientos desde que D. Juan Carlos fue impuesto en el trono por el dictador Francisco Franco, este es un claro ejemplo de lo que debe y no debe ser un Rey. Esta es la diferencia entre la pseudomonarquía que representa D Juan Carlos y la verdadera Monarquía Legítima.
5- Creemos que solo el avance de la sociedad por el camino de la Tradición puede sacar a España de la ruina moral, económica, social y política en que se encuentra. Es necesario, ahora más que nunca, la implantación de las instituciones que nos lleven al ser primigenio de las Españas, en la que sobre los principios de lealtad al Legitimo Rey, Garante y Valedor de la Unión de las Españas; la identidad Católica; la Soberanía particular de sus Reinos y Territorios; y las libertades y derechos de los ciudadanos alumbrados en los Fueros, construyamos una sociedad, justa y verdaderamente libre.
6- Declaramos nuestra firme adhesión al Legítimo receptor de los Derechos a la Corona que la Divina Providencia ha hecho concurrir en la persona de Don Carlos Javier de Borbón Parma, para el que, por la presente, formalmente reclamamos la restitución en el Trono de las Españas.
En España, a 3 de Junio de 2014