Hubo un tiempo en que Rajoy se manifestaba en apoyo de las víctimas del terrorismo.
Hoy la presidenta de la AVT, Ángeles Pedraza, lanza esta alerta para exigir al Gobierno que termine con la burla «hospitalaria» del etarra Bolinaga y demás excarcelaciones de terroristas, incluidos los más sanguinarios de ETA.
Este es el mensaje que Ángeles Pedraza, en representación de todas las víctimas, envía al Gobierno. Compártelo y envíalo tú también sumándote a esta alerta:
La excarcelación del terrorista Bolinaga me humilló desde el primer día, pero ahora me escandaliza conocer que se obtuvo mediante presiones a los médicos para que dijeran que tenía una enfermedad terminal y no podía recibir tratamiento en la cárcel.
Quiero saber quién presionó a la médico forense de la Audiencia Nacional, Carmen Baena, tal y como ella misma acaba de revelar, y por qué se puso en libertad a un asesino, torturador y secuestrador que, evidentemente, no tiene una enfermedad en fase terminal, ni se arrepiente, ni colabora con la Justicia.
Ordene a la Fiscalía investigar los gravísimos hechos denunciados por la forense de la Audiencia Nacional. Aclare este escándalo y pida perdón a las víctimas por la política de excarcelaciones y beneficios penitenciarios a los terroristas, que sigue humillándolas.
La médico forense de la Audiencia Nacional, Carmen Baena, ha revelado que sufrió presiones para informar a favor de la excarcelación del etarra Josu Bolinaga facilitada por el Gobierno de Mariano Rajoy en agosto de 2012.
En una entrevista concedida a la agencia EFE y publicada por distintos medios este domingo 19 de octubre, la funcionaria denuncia haber sido presionada para que dijese que Bolinaga sufría un cáncer en fase terminal, lo que condujo a su puesta en libertad por “razones humanitarias”.
La forense de la Audiencia Nacional se negó a avalar esa falsedad y, de hecho, su informe dejó claro que el asesino y secuestrador podía recibir tratamiento en la cárcel.
La Sala de la Audiencia se basó en otro dictamen, emitido por los médicos de la Defensa del terrorista, para ponerle en libertad “por razones humanitarias” a finales de agosto de 2012.
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Aunque la forense judicial se ha negado a dar más datos, su denuncia de que hubo presiones para excarcelar a Bolinaga es un escándalo gravísimo.
Revela que la política de excarcelaciones y beneficios a terroristas de ETA no se guía por la ley, sino por intereses políticos.
Presionar a un funcionario en el ejercicio de sus funciones es delito y la Fiscalía tiene que intervenir inmediatamente para llegar al fondo de este escándalo.
El 10 de marzo de 2007, al ponerse al frente de una de las manifestaciones más multitudinarias de apoyo a las víctimas del terrorismo, Mariano Rajoy denunció la “injusticia cometida contra todos los españoles” por el Gobierno de Zapatero al excarcelar a Ignacio de Juana Chaos, “un terrorista”, dijo Rajoy, “que no pide perdón, que no se arrepiente, que nos desprecia y, para colmo, se ríe de nosotros con sus parodias de hospital”.
Rajoy ya tiene su propia “parodia de hospital”. De creer la gravísima denuncia de la forense Carmen Baena, la excarcelación de Bolinaga, el asesino de tres guardias civiles, el torturador de José Antonio Ortega Lara, fue una farsa para continuar con el mal llamado “proceso de paz” de Zapatero con ETA.
Dos años después, Bolinaga sigue paseándose en libertad, interpretando la “parodia hospitalaria” que otros escribieron para él.
Basta ya de humillar a las víctimas.
