Detalle de «Tres generaciones», ilustración de C. Sáenz de Tejada

Mi tatarabuelo Juan luchó en la primera guerra carlista como requeté. No sabemos nada de sus andanzas. Mi bisabuelo Antón era joven en la primera guerra y mayor en la segunda.
Mi abuelo Cándido salió de Teniente y terminó de Capitán. Solo sabemos que en una noche hizo una pasarela de madera para que pasasen los cañones. Por lo visto, tuvo mucho mérito, era carpintero de ribera. Hacía barcos. Luego ganó el concurso de lanchas de salvamento que se convocó después que una galerna ahogara a más de 200 pescadores. No le encargaron ninguna a su astillero.
Pero al venir la Reina-regente y el «Príncipe chiquito» a una barra quizás la de Portugalete le encargó la  construcción de la batea real. Le dieron una nominación y una medalla que por venir del Rey enemigo, guardó.
La batea o falúa real está ahora en Aranjuez.
La medalla estuvo escondida 100 años, hasta que mi hijo Ignacio la descubrió hurgando y refitoleando en casa en los cajones de las tías viejas.
Ahora, a mi abuelo, un nacionalista le llama Kandido.
En 1936 el P.N.V. condenó a muerte a mi padre que se escondió y salvó su vida, era mi padre y mi maestro en medicina.
En Madrid, Carrillo (me dan ganas de escribir el nombre sin mayúsculas) mató a mi tía Manuela. Era la Superiora de las monjas Adoratrices. Con ella mató a otras 22 monjas. La anécdota es que una anciana que estaba enferma, los muy gandules no quisieron bajarla en camilla y ella pidió que la llevaran al martirio. Las monjas jóvenes la sentaron en una silla y lallevaron con todas. Hoy, todas son Beatas.
A mi concuñado Esteban lo fusilaron en Barcelona, era Agustino Recoleto. Hoy es Beato.
A mi tío Juan lo lincharon en la cárcel de Larrínaga en Bilbao. Mi hermana cuando empezaron con la memoria histórica les llamó y les contó esto. Le dijeron que esos no valían que sólo los rojos separatistas.
jVaya Memoria Histórica!