Desde el pasado viernes HazteOir.org está sufriendo una operación de acoso de gran calibre. Consiste en impedir que los defensores de la vida puedan manifestar sus opiniones.

Una formidable operación de censura está en marcha y quedan muy pocas horas para reaccionar.

Y si no conseguimos frenarlos, los políticos (algunos políticos) van a imponernos una mordaza de la que nos costará zafarnos.

La operación está encabezada por Cristina Cifuentes, candidata del PP a las elecciones autonómicas de Madrid, que está utilizando la policía y la administración electoral para impedir que los ciudadanos pensemos y tomemos decisiones.

HazteOir.org pasó años enfrentándose duramente a Zapatero, pero ni entonces padeció lo que hoy esta padeciendo: un ataque muy sucio desde el poder político, con tintes mafiosos, con rasgos que parecen calcados del chavismo:

• Cristina Cifuentes ha conseguido que la Junta Electoral de Madrid prohíba la campaña informativa #YoRompoConCifuentes con el absurdo argumento de que la frase «Si votas Cifuentes, votas aborto» es un lema que pide el voto.

• Y a continuación personas del entorno de Cristina Cifuentes están utilizando a la Policía Nacional y la Policía Municipal en Madrid al servicio de sus intereses electorales partidistas, acosando y amenazando a los empresarios del autobús y de las vallas para que retiren la campaña.

• El Director General de Seguridad Ciudadana en la Delegación del Gobierno de Madrid, Carlos Meca, mano derecha de Cristina Cifuentes, está amenazando a los propietarios del autobús de la campaña #YoRompoConCifuentes y a los propietarios de las 60 vallas que la difunden: reciben llamadas telefónicas amenazantes y les manda a los policías a amenazarles personalmente.

Este es el mayor ataque a la libertad de expresión jamás lanzado en España contra un modesto grupo de ciudadanos.

La campaña censurada por el Partido Popular

Un ejemplo del abuso que se está cometiendo: Carlos Meca telefoneó a la Policía Municipal en Vallecas para que desde esa comisaría también amenazaran a uno de los propietarios de las vallas. Esta persona recibió la llamada de la Comisaría del Distrito en estos términos:

«Vete preparando, te va a caer un paquete si no derribas inmediatamente las vallas publicitarias.»

Estas son horas muy críticas para la libertad de expresión. En estos momentos se está decidiendo entre estas dos opciones:

• OPCIÓN 1: Si los ciudadanos podemos expresar libremente nuestra opinión y nuestros valores.

• OPCIÓN 2: Si los ciudadanos hemos de someternos al poder político y a los intereses electorales y renunciar a hablar mientras los partidos hablan.