El cristiano Zafar Bhatti, falsamente acusado de blasfemia en 2012 y llevado a juicio, ha sido condenado a cadena perpetua por un tribunal de Rawalpindi.
Bhatti había sido acusado en virtud del artículo 295 “c” del Código Penal (uno de los apartados que componen la denominada ley de blasfemia ) y condenado por el envío de mensajes de texto (SMS) desde su teléfono móvil, que contenían un insulto al Islam. El cristiano negó los cargos y dijo a la corte que la tarjeta telefónica incriminada no había sido activada por él.
En 2012, Zafar Bhatti fue detenido y trasladado a una cárcel de Rawalpindi. Teniendo en cuenta las amenazas a su vida, su juicio se llevó a cabo en prisión. La última audiencia se llevó a cabo el 24 de abril y el 3 de mayo, el juez dictó la sentencia de cadena perpetua. Según los abogados cristianos con frecuencia los tribunales paquistaníes condenan a la pena de muerte a los acusados de violar el artículo 295 c, pero dadas las pocas pruebas contra Bhatti ha sido condenado a cadena perpetua.
Según la información de la Agencia Fides, la Ong CLAAS (Centre for Legal Aid, Assistance and Settlement), que proporciona asistencia legal gratuita a Bhatti, ha decidido apelar contra la decisión del tribunal, presentando una solicitud ante el tribunal de Lahore. Los abogados cristianos que han defendido a Bhatti han sido amenazados, de ahí la necesidad de mover el proceso a Lahore, donde también vive la familia del hombre. Según los abogados, Bhatti merecía la absolución por falta de pruebas, pero ha sido condenado “a causa de la presión de los islamitas”.
Nasir Saeed, responsable de la Ong CLAAS afirma a Fides: “Los jueces de los tribunales siguen dictando condenas a la ligera, en los casos de personas acusadas de blasfemia, reenviando la responsabilidad a los tribunales de orden superior, sin entender cómo sus decisiones afectan en gran medida a la vida de los acusados y de sus familias. Pasarán algunos años antes de que su caso sea revisado por el Tribunal Supremo, y hasta ese momento él y su familia seguirán sufriendo injustamente”. “La ley de blasfemia en Pakistán – nota – constantemente es explotada y utilizada por venganzas en disputas personales”.
Recientemente la Asamblea nacional de Pakistán ha aprobado una resolución que pide medidas para impedir tales abusos y la introducción de algunos instrumentos de tutela. Sin embargo, tales peticiones han encontrado fuerte oposición en movimientos y partidos islámicos.