Al amparo de leyes mal llamadas de “Memoria Histórica” y de los mensajes interesados del Ministerio de la Verdad, instalado en la mayoría de emisoras de radio y televisión, Esquerra Republicana de Cataluña se postula como el partido que lidera la independencia de Cataluña. Y ello pretende hacerlo bajo un aura de pureza democrática de la cual carece, como demuestra su larga historia golpista y sanguinaria.
Esta que exponemos, es la verdadera ralea de este partido plagado de personajes incoherentes, golpistas, algunos siniestros, otros racistas muchos con las manos teñidas de sangre, de mucha sangre y, a veces, por servir como marionetas de la secta a la que la mayoría de los miembros pertenecían.
Esquerra Republicana de Cataluña, inició su andadura en 1931. Basándose en la línea trazada por el abogado masón Francisco Layret, otro masón, Francesc Macià Lusà, coronel del Ejército español de convicciones monárquico-liberales, fundó un curioso partido: Estat Català de base burguesa, y unas milicias armadas: “el fascio de Maciá” así llamado por sus vinculaciones con el fascismo italiano y llegó a cometer delito de Lesa Patria cuando, en 1926, intentó una “invasión” a España desde Prats de Molló, auspiciada por la masonería y espías de la Italia fascista[1].
Francesc Macià –a pesar de ser un destacado masón, comecuras y antiespañol– tuvo, al parecer, una muerte cristiana pero por influencia de la masonería, obligaron a que fuera enterrado con una ceremonia laica sin ningún signo religioso a pesar de la voluntad de la familia del difunto. Tal es su poder y su lucha contra la IGLESIA y lo que ésta representa.
En las elecciones celebradas posteriormente, ERC volvió a triunfar. En 1933 al fallecimiento de Macià le sucedió Lluis Companys i Jover, también masón, que pertenecía al ala más izquierdista del Partido Republicano Catalanista. En 1934 se convertía Companys en presidente de la Generalitat y, aprovechando la revolución de Asturias de 1934, proclamó el Estado Catalán dentro de la República Federal Española. Sin embargo el ejército, cumpliendo órdenes del gobierno de España, puso las cosas en su sitio y Companys fue encarcelado. La victoria del Frente Popular en 1936 le devolvió a la calle y a la presidencia de la Generalidad. Tras el Alzamiento militar de julio de 1936, la Generalidad y los de ERC se aliaron a los anarquistas de la CNT y a los comunistas del POUM, llegando a integrarles en el gobierno de la Generalidad. El ambiente revolucionario en Cataluña desata una cruenta persecución religiosa y política, en la que colaboran los “escamots” de ERC con patrullas anarquistas. Bajo la responsabilidad de Companys se cometen miles de asesinatos indiscriminados de los cuales hoy no se suele hablar (otra vez el Ministerio de la Verdad). Ayudaba en la tarea independentista un destacado dirigente, Josep Dencàs,[2] conocido como el “Duce catalán” por sus simpatías con el fascismo italiano.
Sin embargo, en mayo de 1937, al producirse los famosos enfrentamientos de comunistas estalinistas del PSUC contra los anarquistas de la CNT y los comunistas del POUM, ERC abandonará entonces a los anarquistas y se aliará estratégicamente con los comunistas estalinistas y con los socialistas del PSOE. Companys requerirá a Largo Caballero y al gobierno republicano de Madrid que intervengan en Cataluña. Así, pudo el gobierno de la República recuperar buena parte de las competencias otorgadas por el Estatuto a Cataluña, entre ellas, el orden público, de modo que el proyecto autonomista catalán moría a petición de ERC, antes de acabar la guerra y de la liberación de Cataluña por las fuerzas nacionales.
La Cataluña que gobernó Companys durante esos tres fatídicos años se puede resumir en estas palabras: sangre, terror, robos indiscriminados, abusos, traiciones, hambre, desolación y frustración. ¿Cómo explicar, si no, que miles y miles de catalanes recibieran con los brazos abiertos a las tropas nacionales como auténticos libertadores? El Ministerio de la Verdad lo oculta y pasa a ser “san Companys”. Tampoco nadie dice que el idolatrado Companys, acabó sus días antes de ser fusilado, arrepentido, confesado y comulgado en el seno de la Iglesia católica. A sus fraternales hermanos no les interesa que se sepa.
Tras la guerra civil ERC fue una sombra de sí misma. Sus dirigentes se exilian a Francia. Y gracias a De Gaulle los restos de ERC pudieron mantener la “ficción” de un gobierno de la Generalidad en el exilio. Mientras que comunistas y anarquistas, los famosos maquis, intentaban en vano prolongar un conflicto ya finiquitado, los pequeñoburgueses de ERC vivían de ensoñaciones en el exilio. El catalanismo hegemónico que ostentaba ERC había perdido todo su prestigio y sólo pudo sobrevivir durante el franquismo gracias a su alianza con la burguesía catalana, ya que, según la historiografía oficial de ERC una parte de la militancia permanecería en Cataluña en la clandestinidad.
La Esquerra del exilio se acomodó a la sombra de Pujol que aglutinó a los ancianos de Unió. Los del “triángulo” le acusaron de “meter bajo palio” a la Generalitat recuperada en Montserrat. No hemos de olvidar que ERC, desde la época de Companys es uno de los partidos que más miembros ha aportado a la masonería, incluyendo al padre de Luis Salat, que fue militante de ERC. Se comprende por ello que Esquerra apoyara el Decreto de la Generalitat en 2001, a petición del PSC, de restaurar el buen nombre de la masonería. En plena transición, ni la masonería ni ERC están para nuevas revoluciones, más bien para instalarse en el naciente régimen.
Esquerra entra en la etapa que no quiere recordar, aquella en la que practicó con fervor y devoción una doctrina filonazi dirigida por Heribert Barrera i Costa quien asumió la tarea de reorganizar ERC en la clandestinidad. Su espíritu de resistencia y clandestinidad del que presumía, fue tal que podía pasearse tranquilamente por Cataluña, llegando a ser Presidente del Parlamento de Cataluña en 1980 y Profesor de Química inorgánica en la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB), con el permiso de las autoridades franquistas, ¡menuda resistencia!
Barrera no era masón, pero fue seguidor de Pere Rossell i Vilar a quien se le considera su padre político, impulsor de l’Associació Protectora de l’Ensenyança catalana desde sus planteamientos supremacistas y racistas: “Diferències entre catalans i castellans” (1917) y “La raça” (1930). De modo que Barrera se convirtió por su influencia en el representante de la “Rauxa”, la línea más fascista que siguen enarbolando muchos de sus seguidores. No fue un personaje mediocre como casi todos los políticos actuales, era persona de carácter y solía decir lo que pensaba. Poco antes de morir, deshinibido de la corrección política, publicó su libro “Què pensa… Heribert Barrera”, y saltó el escándalo. ERC tuvo que pasar de puntillas sobre sus ideas reflejadas en el libro. Exponemos, brevemente, algunas:
GENÉTICA E INTELIGENCIA: “Hay una distribución genética en la población catalana estadísticamente diferente a la de la población subsahariana, por ejemplo. Aunque no sea políticamente correcto decirlo, hay muchas características que vienen determinadas genéticamente, y probablemente la inteligencia es una de ellas”.
RACISMO: “El cociente intelectual de los negros de Estados Unidos es inferior al de los blancos”
EUGENISMO: “No veo fuera de lugar esterilizar a una persona que es débil mental por un factor genético”
LA INMIGRACIÓN ACTUAL; “Los problemas del Tercer Mundo no han de caer sobre los hombros de Cataluña, que sólo tiene seis millones de habitantes, no ha tenido colonias y no tiene Estado”. //“Una de las propagandas del multiculturalismo es que el mestizaje es un enriquecimiento. ¿Por qué? .¿Qué ganamos con que en este momento se bailen en Cataluña tantas sevillanas?. Nada.//Si continúan las corrientes migratorias, Cataluña desaparecerá” “Hay que evitar por todos los medios otra invasión de población no catalana”.
El pasado 6 de julio se cumplieron los cien años del nacimiento de Barrera, pero el Gobierno catalán no lo ha conmemorado a pesar de haber sido figura destacada para ERC. La causa es que se convirtió en personaje incómodo hasta para Esquerra y para una parte de la clase política catalana cuando a principios de 2001 se publicó el citado libro de Enric Vila. Sin embargo, muchos de los actuales dirigentes son continuadores de sus ideas, como por ejemplo Oriol Junqueras al que aleccionó en el supremacismo de la raza catalana y le transmitió las ideas de Francesc Maciá de “imponer browning en mano el respeto a la dignidad de la raza”[3] catalana, claro. De momento, Junqueras, aunque en las elecciones de 2014, le salió el hitlerito y pidió votar según la pureza catalana de la candidatura, no mencionó la browning como elemento de convicción.
Volveremos más adelante a Junqueras. Sigamos con la historia de Esquerra. Si no hubiera sido por la burguesía catalanista hoy ERC se habría extinguido. Cuando ERC ya languidecía fue tomada al asalto y con manejos antidemocráticos por los jóvenes de La Crida, (subvencionada también por CIU), manipulando asambleas y votaciones Àngel Colom i Colom, fue el encargado de dirigirla. En 1992, junto a Carod-Rovira, abrió las puertas del partido a exterroristas de Terra Lliure. Muchos ocuparon altos cargos en ERC y luego han aparecido sus nombres en la Asamblea Nacional de Cataluña.
Las luchas cainitas llevaron a que sectores más duros de ERC, algunos provenientes del MDT-PSAN[4] tomaran las riendas del partido, expulsando a Àngel Colom y Pilar Rahola. Colom se marchó al Partit de la Independencia (PI) inspirado en la Crida a la Solidaritat, anunciando su intención de “levantar una plataforma de agitación nacionalista con el objetivo de influir en los partidos políticos nacionalistas para que no olviden su tarea de «hacer país”. Tras su fracaso se refugió en CIU que lo integra y le manda a una oficina de la Generalitat en Marruecos desde donde ha llevado una gran labor de atraer a refugiados magrebíes a Cataluña, considerando que por desconocer el español, era más fácil, al verse obligados a aprender catalán, inculcarles las ideas separatistas. Son los que llama Nous Catalans.
En ese momento de ruptura Carod-Rovira se hace dueño del partido. Éste cuenta con 5.000 militantes y unos 500 cargos públicos, principalmente concejales de Ayuntamientos. La estructura dirigente que impone Carod-Rovira proviene en buena parte de grupúsculos ultra-radicales que habían fracasado en todos sus intentos de realizar una “revolución marxista” en plena transición. Y de ahí emergió la ERC separatista y radical que hemos conocido en los últimos años. Hoy nos quieren hacer creer que es un partido pacífico y de gobierno. Pero nada más lejos de la realidad. La actual ERC es la heredera de un resentido Francesc Macià; de un ambicioso, histriónico y asesino llamado Companys; un partido de burgueses que connivieron con el franquismo; un juguete en manos de CiU y plataforma de la radicalización del nacionalismo asumiendo las tesis de Terra Lliure: marxistas y separatistas. Desde la primera militancia burguesa y filofascista proveniente del Estat Català, ERC evoluciona hasta las últimas incorporaciones de los grupúsculos marxistas leninistas y se crean dos facciones: una cuya línea ideológica es interclasista y la otra de izquierda radical, ambas trufadas de masones. Ejemplo de ello son Omnium Catalá y la Asamblea Nacional Catalana (ANC).
Sobre altos cargos militantes de Esquerra Republicana de Catalunya relacionados con algunas sociedades secretas, destacamos a Mª Ángeles Prats gran maestra masona del Derecho Humano, maestra en España de uno de los Ritos de Memphis-Misraïm. También Marta Riera i Franco pertenece a la organización paramasónica «Orden Illuminati» del gran maestre Gabriel López de Rojas. Marta Riera iba en las listas electorales de ERC y es miembro fundador del Colectivo Els Altres Andalusos; otro masón de ERC es Carles Bonet (senador de ERC); también lo es Josep Bargalló[5]. Algunos añaden a Junqueras, al que ven como próximo presidente, y a Puigdemont, quien últimamente no se ha recatado de demostrar sus devaneos con la masonería asistiendo a sus actos. Aprovechó su invitación a la cena de gala de la Gran Logia Española para reunirse en privado con representantes de 31 delegaciones extranjeras y ante ellos dijo que Cataluña comparte sus principios de tolerancia, diálogo constructivo y respeto, que también impregnan también la historia de Cataluña[6].
Es conveniente recordar un hecho significativo: La traición a España del nacionalismo vasco fue seguida por el abandono de la confesionalidad, condición exigida para ser agentes del Poder masónico, comandado por los Rockefeller y los Rothschild. Aguirre lendakari en el exilio consiguió, del presidente masón Franklin D.Roosevelt, la promesa de apoyo para la disolución de España al finalizar la II guerra mundial. El plan independentista incluía la anexión de Navarra a las tres provincias Vascongadas bajo la hegemonía política del PNV (prácticamente conseguido). No es casual que la «generalitat» tenga embajada en el Rockefeller Center como tampoco es casual que Israel sea el primero en apoyar la independencia de Cataluña y todo ello con un aumento del laicismo y la actuación de sectas que contribuyen a destruir la sociedad. Estos factores colaborarán en que España se desmorone como un castillo de naipes.
[1] Los Hechos de Prats de Molló (por la localidad del Rosellón francés), fue un intento de invasión militar de Cataluña efectuado desde Francia para conseguir su independencia. Planeado por Francesc Maciá y la dirección del partido Estat Catalá, descubierta y abortada en 1926. El plan consistía en la penetración de dos columnas que tenían que ocupar Olot y proclamar la República Catalana. El plan inicial era organizar una incursión fronteriza que le permitiera ocupara el territorio suficiente para llamar la atención del mundo y exigir la solución del «caso catalán”.
Macià se reunió en París con representantes de la CNT y con los nacionalistas radicales vascos aberrianos (que entonces controlaban el PNV) para organizar un alzamiento simultáneo en Cataluña y el País Vasco, que sería apoyado con movilizaciones en otras regiones españolas que contarían con el apoyo de algunos militares. De aquella reunión surgió el llamado Pacto de la Libre Alianza por el que se creaba un Comité General Revolucionario, o Comité de Acción, que sería el que dirigiría el levantamiento.
En octubre de 1925, tras incorporar a los comunistas al Pacto de la Libre Alianza, Macià viajó a Moscú —acompañado del secretario del PCE José Bullejos— para recabar el apoyo del gobierno soviético y de la Komintern. No lo obtuvieron porque Zinoviev y sus amigos habían caído en desgracia y habían sido desposeídos de todo poder por Stalin.No obstante, Maciá decide llevar adelante su plan.
Por esas mismas fechas entró en contacto en París con un grupo de exiliados italianos entre los que se destacaba Riciotti Garibaldi, nieto del héroe de la unificación italiana, quien en realidad no era un combatiente antifascista sino un agente doble al servicio de la policía política de Mussolini. Gracias a éste, Primo de Rivera tuvo conocimiento de la invasión que se proyectaba .Franceses en su zona y españoles en ésta abortaron la invasión. Los traidores fueron condenados a penas risibles. A pesar del fracaso, el complot tuvo un amplio eco internacional lo que provocó que cobrara «una inesperada dimensión épica» y diera «origen al persistente mito de l’Avi [Macià], precisamente en el momento de más baja popularidad de la Diictadura.
[2] Nació en Vich el 19 de marzo de 1900-13 de febrero de 1966 en Tánger). Ingresó en la masonería a través de su suegro. Participó en los complots previos a la proclamación de la República Catalana en 1931, habiendo participado en la fundación de (ERC) unos días antes. Fue elegido diputado de ERC por la circunscripción de Barcelona (capital) en 1931 y al Parlamento de Cataluña en 1932. Presidente de las Juventudes de Esquerra y consejero de Sanidad y Asistencia Social en el gobierno de Maciá,, posteriormente, fue consejero de Gobernación en el primer gobierno de Companys en enero de 1934. Influido por las ideas racistas de Pere Martir Rossell i Vilar, se autodefinía como «nacional socialista». Fue uno de los máximos responsables del intento revolucionario como reacción a la entrada de tres ministros de la CEDA al gobierno de la República. Tras su fracaso, optó por exiliarse. Durante la intentona fue el responsable directo de la formación de grupos paramilitares que él mismo dirigía y la detención de varios militantes anarquistas de la CNT. Se criticó su actuación en esta ocasión como consejero de Gobernación cuando ante la respuesta de los militares sus guerrillas desaparecieron y él mismo huyó del Palacio de la Generalidad por las alcantarillas, mientras otros grupos que habían participado en el intento lucharon hasta el final, como fueron los resistentes en el local del Centro Autonomista de Dependientes del Comercio y de la Industria (CADCI).
Durante los primeros días de la Guerra Civil tuvo que exiliarse de nuevo debido a las presiones y amenazas de los anarquistas, quienes recordaban la terrible represión que éste había desatado contra ellos cuando ocupaba cargos políticos y muchos influentes empresarios de hoy perdieron a sus padres en ribazos por culpa del masón Dencàs. Se exilió en Italia y después en Marruecos donde trabajó como médico creando un centro médico benéfico subvencionado por el Banco Inmobiliario de Marruecos, fundado por el también exiliado Josep Andreu i Abelló, dirigente de ERC.
[3]https://www.dolcacatalunya.com/2014/01/el-plebiscito-que-queria-macia-para-imponer-browning-en-mano-el-respeto-a-la-raza/
[4] La Izquierda Independentista catalana es el nombre que recibe, desde finales de los años 60, concretamente con la aparición del Partit Socialista d’Alliberament Naciona (PSAN) el movimiento político que propugna la independencia, el socialismo y más recientemente también la liberación de género en los denominados, por ellos, Paises Catalanes. El movimiento se caracteriza por su rechazo al ordenamiento jurídico y político de los Estados español y francés, y por lo tanto el enfrentamiento con estos estados y sus instituciones; y por su rechazo a las posiciones autonomistas que aplazan o condicionan el logro completo de la independencia. En 1976 se proclama marxista-leninista
La estrategia de la Esquerra Independentista ha evolucionado a lo largo de los últimos 30 años. Si a finales de los 70, los 80 y principios de los 90 estuvo marcada por la actividad de la organización armada Terra Lliure y el movimiento político que representaba el Moviment de Defensa de la Terra (MDT), una parte del cual inició la estrategia de Unidad Popular con el objetivo de acumular fuerzas entre los sectores populares más combativos para la articulación de un movimiento de liberación de masas que se ha ido fraguando alrededor de la Candidatura d’Unitat Popular (CUP).
[5] Burbuja.info: El independentismo Catalán está siendo impulsado por la Masonería y la Orden Illuminati
[6] http://www.europapress.es/nacional/noticia-puigdemont-dice-masones-cataluna-comparte-principios-tolerancia-dialogo-constructivo-respeto-20170313130341.html