Venimos comentándolo hace tiempo. Surgieron las primeras craqueladuras, después llegaron las grietas y ahora parece que la ruptura es inminente. De momento, los catalanes, siempre exigentes como niños malcriados, olvidados del seny del que tanto presumían, se han dejado arrastrar por la rauxa para cometer unos actos, (aunque los nieguen), tan vandálicos como poco democráticos.
A lo largo de los siglos hemos sufrido turbulencias semejantes. Tanto, que hasta actuaron personajes similares, que llegaron a penosos pactos que los clásicos traidores firmaron, por distintos motivos, pero todos con un mismo objetivo, destruir España. En lo que sí ha habido diferencia sustancial ha sido en la obligada contestación de los poderes públicos. Repasemos:
1º.- La gran devastación que en el 711 sufrió España fue también producto de un pacto entre traidores, aquél por el que el conde godo don Julián (partidario de los herederos de Witiza, el rey anterior), ayudó a los moros de Tariq a atravesar el estrecho y así facilitar la expansión del Islam en prácticamente toda la península.
De modo que la invasión musulmana tuvo tres autores principales: el “conde Don Julián”, que ayudó y colaboró a que las tropas de Tariq cruzaran el Estrecho. Todas las fuentes escritas de la batalla, tanto cristianas como árabes coinciden en que los parientes de Witiza cambiaron de bando en mitad de la misma. También los cronistas árabes, aseguran que fue determinante la traición porque los visigodos se vieron privados de su clara superioridad numérica y quedaron indefensos ante la táctica envolvente de los musulmanes. Habían pactado la traición la noche anterior, en una reunión en el campamento árabe, a cambio de mantener sus derechos al trono y sus propiedades. La verdad es que los witizanos sí cumplieron su pacto, pero los musulmanes se olvidaron de todo lo pactado. Aprendieron de los romanos: “Roma no paga traidores”.
El segundo actor fue un hombre de iglesia, el obispo de Sevilla, don Oppas, practicando el cohecho con los invasores para – según él y sus seguidores witizanos – ayudar a la conquista de Hispania, fue el principal delator de sus correligionarios ante el nuevo poder que le utilizó como emisario para intimidar a los núcleos cristianos de resistencia. Y como última causa, una vez derrotado el ejército visigodo del rey don Rodrigo en Guadalete, la ayuda de los judíos a facilitar la expansión del Islam en prácticamente toda la península. Setecientos años costó recomponer España.
2º.-En el XIX volvimos a sufrir otro tantarantán cuando los masones de la I República trataron de imponer su concepción de República Federal. España quedó convertida en un rompecabezas y un guirigay su Parlamento, dividido entre benevolentes e intransigentes; hasta el punto que su primer presidente, (Estanislao Figueras), viéndose incapaz de que se pudiera establecer un mínimo diálogo sensato entre los miembros de la Cámara, salió de ella diciendo que se iba a dar un paseo y…..apareció en París.
Los federalistas intransigentes se dedicaron a recomendar a sus seguidores que formasen cantones locales y se enfrentaran al Gobierno, ahora del segundo presidente, el catalán Francisco Pi y Margall. Aparece ya claramente la influencia de la masonería al formar en Madrid un Comité de Salud Pública bajo la presidencia de Roque Barcia[1], para vigilar los intereses de la nación y llevar a cabo la insurrección cantonal. Se escoge Cartagena por sus magníficas defensas y porque de allí era oriundo el diputado Antonio Gálvez Arce, masón de la logia Miravete, tonto útil de su fraternal hermano, Roque Barcia, de escalón más alto. La necesidad obliga a Gálvez a promover expediciones para abastecerse y establecer nuevos cantones aliados, de modo que fondea en Torrevieja (Alicante), donde también se había formado una Junta Revolucionaria liderada por la feminista, simpatizante de sus ideas, Concha Boracino[2], quien decide apoyarle entregándole como contribución para la guerra los 70.000 reales que había en la caja de las salinas. En vista del éxito, Gálvez decide subir hacia Alicante, pero allí se encontró con que los alicantinos bajo influencia de Eleuterio Maissonnave[3], decididamente a favor del unitarismo republicano, se opusieron a la insurrección cantonalista, les hicieron frente, se negaron a pagar y los cartageneros se tuvieron que volver hacia su ciudad solo con un barco que decomisaron.
Permítanme una anécdota que refleja muy bien las características de estos grupos revolucionarios. En la singladura de regreso desde el fracaso de Alicante, la flota cantonalista se encontró con unas fragatas alemanas que, siguiendo la declaración del gobierno, las consideró navíos piratas por lo que tenían derecho a capturarlas. Los cantonalistas se arrugaron, olvidaron su arrogancia y arriaron sus humos al tiempo que su bandera a la que sustituyeron por la roja y gualda de la República y entregaron a los alemanes el barco requisado en Alicante en pago a que les permitieran continuar viaje.
A finales del mes de julio de 1873 España se desangraba; 32 provincias estaban fuera del control gubernamental.
3.-Vuelta a la normalidad y de nuevo los revolucionarios atacan España y esta vez en Cataluña. En 1934 el gobierno de Companys declara la República catalana, dentro de la II República Española. La anarquía es total y los muertos se cuentan por millares.
En los tres casos encontramos similitudes entre ellos y con la difícil situación actual. Nos duele reconocer la politización de ciertos miembros de la Iglesia y su postura a favor del troceamiento de España. Miembros de la Iglesia, imitadores de don Oppas, encontramos en esta desgraciada situación unas 400 personas defensoras de la independencia. Clara y abiertamente independentista se declara en público el obispo de Solsona Monseñor Novell, quien, partidario confeso de la autodeterminación, asegura que «el derecho de los pueblos a decidir es más importante que la unidad de España» y, por eso, invita a sus fieles a implicarse «en el proceso de participación ciudadana en la elaboración de la nueva Constitución». Según los cálculos basados en las declaraciones de los propios interesados, hay al menos otros cuatro obispos claramente soberanistas. Los otros nueve que viven y trabajan en esa comunidad son más moderados, pero en todo caso, catalanistas, a los que hay que añadir los sacerdotes y religiosos sin cargos relevantes. Del monasterio de Montserrat destacan las posturas del monje Hilario Raguer y del abad Josep Maria Soler. Toda la jerarquía catalana asume y hace suyos los documentos del catalanismo religioso en busca de una iglesia propia y catalana, olvidándose de la universalidad de la Iglesia[4] y de tantos compañeros suyos en la fe, que murieron mártires por odium fidei a manos de aquellos revolucionarios del 36, incluido el mismísimo Companys.
También existió en los tres casos, la misma reacción del poder en defensa de la Patria. Don Pelayo desde las montañas asturianas fue el iniciador de una reconquista que durante siete siglos llevaron a cabo todos los reyes hispánicos hasta ver coronada la empresa por los Reyes Católicos.
En el XIX, bajo el gobierno de la I República, se produjo La revolución cantonal y excepto Figueras, que huyó de sus obligaciones, Salmerón y Castelar adoptaron medidas para controlar la juerga independentista que había aumentado en el gobierno del catalán Pi i Margall.
Salmerón actúa y sin que le temblara el pulso, decidió atacar el cantonalismo en serio, militarmente, con todas las fuerzas del Gobierno. Mostró mucha más energía que Pi en la represión del cantonalismo, y ello convenció a los intransigentes de que no lograrían imponer su revolución cantonal. Mandó a dos generales Martínez Campos y Pavía.
*Arsenio Martínez Campos marchó a Levante. Se le encargó atacar Valencia, y bajar hacia Alicante y Murcia, donde debía confluir con Pavía. Murcia era el cantón más significativo, porque los intransigentes de Antonio Gálvez dominaban a las masas civiles, y Juan Contreras San Román dominaba la base militar de Cartagena. El 6 de enero se produce una gran tragedia al explotar el parque de artillería de Cartagena, muriendo más de 300 mujeres y niños que allí estaban refugiados. Fue la mayor tragedia de esta clase ocurrida en España hasta entonces. El General Martínez Campos sitia la ciudad, y comienzan a surgir las deserciones de políticos y militares del Cantón.
*Manuel Pavía Rodríguez de Alburquerque combatió contra los carlistas en Navarra y contra los movimientos cantonales en Andalucía, siendo designado capitán general de Castilla la Nueva durante la presidencia del republicano unitario Emilio Castelar, un presidente con quien mantuvo una buena relación, dado que ambos compartían la idea de que España debía solucionar sus problemas con «orden, unidad y disciplina«, si bien el mandatario consideraba que toda acción debía llevarse a cabo dentro de la legalidad y Pavía era conocido por su proclividad a dar un golpe militar si la legalidad no bastaba para llegar a ese fin, cosa que al fin hizo, aunque sea una falacia lo de su entrada a caballo en las Cortes.
Nicolás Salmerón no dudó, para aplastar la rebelión, en emplear al ejército poniendo al mando a generales dispuestos a defender la unidad de España, política que acentuó el siguiente gobierno del también «moderado» Emilio Castelar que, tras suspender las sesiones de las Cortes, prosiguió el asedio del Cantón de Cartagena, el último reducto de la rebelión, que finalmente cayó el 12 de enero de 1874, tras el triunfo el 3 de enero del golpe de Estado de Pavía que puso fin a la República Federal Española. Como siempre, los revolucionarios salieron huyendo, esta vez en la poderosa fragata Numancia, un grupo formado por el cabecilla Antoñete y unos mil de sus seguidores. Atrás dejaron Cartagena, con el 70% de los edificios destruidos y dañados y lo más grave, las 300 víctimas de la explosión del arsenal.
Un tema que puede volver a producirse. Los cantonales del XIX se dieron pronto cuenta que sus minúsculos estaditos no daban de sí para mantener una economía, ni siquiera suficiente, así que decidieron unirse por grado o por fuerza, entre varios. Bien pues la cosa no cambia tanto. Ahora en el siglo XXI, los insurrectos actuales hablan enfervorizados de hacer un “anschluss” y crear “los països catalans” anexionándose los Reinos de Mallorca y de Valencia y la parte oriental del Reino de Aragón.
Setenta años después proclaman la República catalana, pero Alejandro Lerroux, presidente de la II República, ordenó al general Batet que solucionara el conflicto. Este solo necesitó instalar dos cañones frente a la Generalitat para que se rindieran. Algunos también huyeron, hasta por las alcantarillas, pero el presidente Lerroux no dudó en meter a los cabecillas, incluido Companys, en la cárcel.
¿Y ahora? Entristece comparar aquella firme actitud mantenida por aquellos gobiernos anteriores con la meliflua, dubitativa e incomprensible actitud de los poderes actuales.
Ahora tensionan la situación para que la gente, ya agotada, acepte el acuerdo (similar al que llegaron los masónicos jefes de ambos ejércitos en un “nuevo abrazo de Maquinguayo” como aquél celebrado antes de la batalla de Ayacucho, por el que los generales masones de los dos ejércitos contendientes en América del Sur, llegaron al acuerdo de que el español con mayor número de hombres, armas y pertrechos, capitularía a las primeras de cambio ante el ejército independentista, menor en número, pero amparado por una fuerza poderosa, la Gran Logia de Inglaterra, la más grande del mundo en ese momento, que ideó un plan para independizar la mayoría de las colonias españolas en América. Para ello formó Logias en toda América, como la Logia Lautaro, tan importante en la zona. Éstas Logias eran Operativas, es decir, tenían una meta específica, en éste caso la independencia de las colonias españolas.
Y esta influencia de la masonería nos lleva a hablar del tercer factor de distorsión que facilitó la entrada y asentamiento de los moros en la península. Entonces solo se hablaba de judíos, hoy hablaremos de una importante secta que, al menos en la cumbre de la pirámide, los que desde allí la dirigen son importantísimas familias judías como los Rothschild y los Rockefeller que han expresado en varias ocasiones su objetivo de establecer un Gobierno mundial bajo la guía de una religión igualmente mundial, sincretista, cuyo centro es el hombre. Todo bajo la apariencia de una filantropía sin precedentes para fomentar el hedonismo, la felicidad en el mundo mediante el aborto, la eutanasia, la ideología de género, etc.
A esta élite pertenece Georges Soros, [5]creador de la fundación Open Society Iniciative for Europe cuyo objetivo es la destrucción de las culturas locales y la imposición del multiculturalismo como única vía política para el desarrollo de Europa (lo que está demostrando ser un callejón sin salida que la está destruyendo). De modo que el todopoderoso Georges Soros ha lanzado sus largas garras en Cataluña. Esta fundación financió en 2014 organizaciones pro-independentistas de Cataluña encubierto por dos de sus socios, el magnate de la comunicación Jaume Roures y el ex vicepresidente del Barça, Carlos Villarrubí.[6] Documentos de dicha fundación han vuelto a salir a la luz a pocos días de celebrarse el referéndum ilegal del 1-O. Según documentos internos, la Open Society Initiative for Europe entregó: 80.000 dólares a SOS Racisme Catalunya para frenar a los derechistas de Plataforma por Catalunya (PxC); 27 049 dólares (al menos entre 2013 y 2014) al Consell Diplomàtic Pùblic d’Catalunya, (DIPLOCAT) consorcio público-privado diseñado para fomentar el diálogo y construir relaciones de confianza entre los ciudadanos de Cataluña y el resto del mundo y 24 973 dólares al Centre d’Informació i Documentació Internacionals en Barcelona (CIDOB) que en la práctica desempeña el papel de un preministerio de Relaciones Exteriores para la Generalitat de Cataluña.
Las obsesiones de Soros pasan por frenar el crecimiento de la ultraderecha europea rearmando ideológicamente a la izquierda populista. Por ese motivo, apoya a Podemos según ha publicado el colectivo Utopía en un artículo firmado por Andréi Kononov (ttps://es.sott.net/article/47988-La-conexion-de-Podemos-y-eldiario-es-con-Soros-esta-en-AECID) con el problema agravado por la participación de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) principal órgano de gestión de la Cooperación Española, orientada a la lucha contra la pobreza y al desarrollo humano sostenible a través de las ONGD.
En los documentos filtrados por Wikileaks, también aparecen Pablo Iglesias y los eurodiputados de Podemos en sintonía con George Soros. De hecho, Podemos asume plenamente la agenda mundialista en la eliminación de las fronteras, las puertas abiertas a la inmigración, la postura favorable a la islamización, la desnacionalización de España, la demolición de sus raíces cristianas, la destrucción de la identidad de los españoles, la corrosiva ideología de género. Algunos no dudan en afirmar que Podemos es puro plan Soros[7].
Sin embargo, a pesar de esas fuerzas destructivas y al contrario que en el 711 cuando los árabes invadieron la península, que dejaron anonadado al pueblo, de modo que ni pequeños terratenientes, ni siervos ni esclavos, tuvieron el más mínimo atisbo de reacción, ahora los constitucionalistas han sacado sus banderas a ventanas y balcones para dejar constancia de que el pueblo está en defensa del orden y la ley y de la unidad de España, la “unitas”, esa que dice que no es posible dividir o separarla sin modificar su integridad o esencia.
Por fin Rajoy ha tomado la decisión de aplicar el artículo 155 de la Constitución por el que se autoriza al Gobierno de la Nación a cesar al presidente de la Generalitat de Cataluña, al vicepresidente y a los consejeros que integran el Consejo de Gobierno catalán. Toma otras medidas pero muchos dicen que es un 155 “descafeinado”, no obstante, ocho horas más tarde de anunciarlas, ya se han producido preocupantes reacciones:
*Forcadell, presidenta del Parlamento catalán ha declarado: “Rajoy ha traspasado todos los límites con un golpe de Estado de facto» Es un «golpe autoritario» por parte de un Estado miembro de la UE, que quiere «acabar con las atribuciones de un Parlamento y sus representantes» y ha terminado afirmando: “Nos comprometemos hoy ante el ataque más grave a las instituciones catalanas a defender la soberanía del Parlamento, sus atribuciones y los derechos de los diputados a ejercer sus funciones y a defender la democracia con firmeza«, porque los conflictos políticos «se resuelven políticamente».
*Carles Puigdemont: «El Gobierno ha tomado la peor decisión desde Franco (…) menospreciando la voluntad popular (…) Ha añadido que el Ejecutivo se ha autoproclamado ilegítimamente el representante de la voluntad de todos los catalanes, y ahora «quiere nombrar un directorio para que teledirija desde Madrid la autonomía de Cataluña
*La CUP pide al Govern que «esté a la altura» de la movilización ciudadana y declare de manera «inminente» la república y la independencia de Cataluña«. (Hay que advertir que la Fiscalía ha anunciado que presentará una querella ante la Sala Penal del Tribunal Supremo acusando de rebelión a Puigdemont si éste declara la independencia).
*Podemos Andalucía, por medio de su secretario de Comunicación Pablo Pérez Ganfornina, ha considerado que es «un día triste para España y para la democracia», porque la aplicación del artículo 155 «se carga el pacto democrático» en el país.
*El PSOE sigue polarizado y con alguna corriente divergente dentro del sanchismo. Los alcaldes del PSC de Santa Coloma de Gramenet, Terrassa, Granollers y Castellar del Vallès han reclamado a su partido que se oponga «frontalmente» a la propuesta del Gobierno. En consecuencia, en el PSC rechazan el 155 y no dan «cheque en blanco» al PSOE en el Senado.
Sería deseable, aunque tengo dudas de que lo hagan, que escucharan a don Antonio Tajani, último premio Príncipe de Asturias de la Concordia que en su discurso a la entrega del mismo, ha rechazado los “egoísmos nacionalistas que lleva a zonas como Cataluña a pedir mediación de la Unión Europea para conseguir sus fines separatistas” y ha defendido con más brío que los poderes del Estado Español, el respeto al Estado de derecho.
Estamos de acuerdo, así se hizo en ocasiones anteriores en España, pero ahora, ante el monumental lío que se puede organizar, solo nos queda que implorar a Dios su ayuda para que aquellos que se dicen democráticos pero no respetan el estado de derecho, no nos lleven a la terrible y dolorosa situación de decir
DELENDA EST HISPANIA
[1] Roque Barcia Martí (1823-1885) fue un filósofo, lexicógrafo y político republicano perteneciente al Partido Demócrata español y luego, durante el Sexenio Democrático, al Partido Republicano Federal. Pertenecía a la logia capitular Comuneros de Castilla, de filiación republicana. En tiempos de dictadura y opresión el secretismo que envolvía a las logias masónicas permitía a los disidentes del régimen reunirse en la clandestinidad para poder seguir cultivando su ideario con miembros afines a su manera de pensar, y en la medida de sus posibilidades divulgarlo, aunque en la mayoría de los casos con escasa difusión. La masonería era el último reducto de los librepensadores que no emigraban del país. Por lo tanto, existe documentación suficiente (Poyán Rasilla 1984) que constata la relación entre Roque Barcia y la logia capitular Comuneros de Castilla, logia fundada en 1871 de orientación liberal y tolerante según sus propios estatutos. http://infoling.org/elies/ 224) concluye tras el análisis de distintas fechas, que Roque Barcia pudo ser un masón activo en la vida política entre 1871 y 1874, pese a que desde 1855, durante su militancia en el partido demócrata, profesaba ideas políticas y religiosas de libertad y tolerancia afines a las de esta sociedad.
[2] Líder de la revolución cantonalista en Torrevieja, era hija de Giuseppe Boracino (natural de Genova; debió nacer hacia 1815 o 1820, de forma que en la década de los sesenta sería mujer madura de cuarenta o cincuenta años. Casada con Parodi, adherido al Partido Demócrata, que luego fue un activo militante republicano-federal. Con ocasión de la Septembrina, fue elegido vicepresidente de la Junta Revolucionaria liderada por Vicente Castell. En adelante sus negocios marcharon cada vez mejor, de forma que en tres o cuatro años amasó una fortuna de importancia, llegando a ser propietario del único embarcadero privado existente en Torrevieja. Estaba además relacionada con la masonería a través de su cuñado Pedro Cacciaro, militante republicano y cabeza de un conocido linaje de tradición masónica, tenía negocios diversos en la localidad.
[3] Eleuterio Maisonnave y Cutayar (Alicante, 6 de septiembre de 1840 -Madrid 5 de mayo de 1890), político español, miembro del Partido Republicano Posibilista. Diputado a Cortes por vez primera en 1869, año en que también fue elegido alcalde de Alicante, el primero de la historia por sufragio universal masculino, reconocido como ‘héroe de la caridad’ por su abnegada labor en pro de sus paisanos cuando la epidemia de fiebre amarilla de 1870, fue ministro con tres presidentes de la fugaz I República Española: de Estado con Pi y Maragall y de Gobernación con Salmerón y Castelar. Aumentó sensiblemente el número de contingentes de la Guardia Civil; creó la Milicia Nacional, origen del posterior Servicio Militar obligatorio y concedió mayores subvenciones a diputaciones y ayuntamientos para afrontar sus necesidades de carácter social. Fundó la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Alicante, después Caja de Ahorros del Mediterráneo. Destacó en el gobierno de Castelar por la dura represión del movimiento cantonalista y de los insurrectos carlistas.
Agnóstico y anticlerical, se inició en 1876, con 36 años de edad, en la masonería en la Logia Alona nº 44 de Alicante, donde alcanzó el grado 33. Su nombre simbólico era Pericles. Fue Gran Comendador del Supremo Consejo Grado 33 del Rito Escocés Antiguo y Aceptado (REAA).
[4] Hay que señalar que, enfrente, la generalidad del Episcopado español proclama que la unidad de España es «un bien superior» que hay que defender porque de ello depende también la credibilidad social de la propia Iglesia, según la tesis del cardenal Antonio Cañizares.
[5]Se han hecho públicos diversos proyectos con los que este multimillonario (uno de los más ricos del planeta) ha influido desestabilizando la política española. Se ha demostrado mediante documentos que están detrás de las campañas de manipulación y desinformación mediática respecto a las alteraciones que se produjeron el 15 M y al fenómeno de los refugiados que están llegando a Europa por millones, muchos de ellos asesorados por ONG financiadas directamente por Soros. También financia movimientos anti católicos para que lleven acciones concretas contrala Iglesia Católica, como es el caso de FEMEN.
[6] Manuel Cerdán en OK diario 11/10/2017
[7] https://maestroviejo.es/george-soros-la-mano-oculta-detras-de-podemos