Pastores en Sudán están reclamando en contra del arresto de cinco líderes de iglesia ocurridos la semana pasada, por supuestos “disturbios en contra del orden público”, y dijeron que los cristianos están siendo castigados por el gobierno a causa de predicar a musulmanes y por vivir bajo los preceptos del Nuevo Testamento.
“El gobierno está usando la corte y la ley para perseguir cristianos que son pacíficos, y que llevan adelante su mandato de la Gran Comisión dejada en el Nuevo Testamento. Después de pasar 14 meses en prisión en Khartoum, fui liberado este año en enero, por falta de evidencia. Fui nuevamente arrestado este domingo sin ningún fundamento,” dijo el Pastor Kuwa Shamal, quien ha sido apresado incontables veces sin cargos en su contra.
ICC, un grupo de ayuda a cristianos perseguidos en el mundo, dijo que los cinco líderes cristianos eran de la Iglesia de Cristo, e incluía al Rev. Ayoub Matin, el evangelista Habail Abraham, el Rev. Ali Haakim, el pastor Ambrat Hammad, y Abdo Elbaya.
“¿Por qué este gobierno nos quiere obligar a rescindir el liderazgo de la Iglesia, para así poder formar un comité que la intervenga? ¿Qué crimen hemos cometido?” preguntó Shamal.
El Rev. Ayoub Tiliyan explicó que la persecución en contra de cristianos ha aumentado desde el año pasado en el país africano.
“Es muy perturbador ver que, el gobierno al que nos sujetamos, por el que oramos, y al que le pagamos nuestros impuestos, nos persiga y ataque solo por pertenecer a una fe diferente,” dijo Tiliyan.
“Esta se vuelto la regla con los años, con amenazas y ataques desde los últimos tres. Varias iglesias han sido demolidas, pastores arrestados y evangelistas amenazados para que dejen de predicar el Evangelio a los musulmanes. “
La nación con mayoría islámica ha cerrado al menos cuatro iglesias en Khartoum solo en este año, con planes de parte del gobierno de demoler otras 20.
La Iglesia de Cristo, que pertenece a una denominación reformada, ha sido el blanco varias veces, soportando el arresto de otros siete de sus líderes en un incidente en Agosto.
Los pastores fueron acusados de negarse a cumplir una orden del gobierno, que demandaba que declinaran en su liderazgo eclesiástico y se lo cedieran a las autoridades.
Los pastores fueron posteriormente liberados, aunque aclararon que no cederán a las demandas del gobierno de intervenir la Iglesia.
Otras fundaciones, como Ayuda a La Iglesia Perseguida, denunció que niños cristianos del sur de Sudán, que se encuentran en campos de refugiados, son forzados a recitar oraciones del Islam a cambio de comida.