La Dirección General de Cultura y Patrimonio de la Generalitat Valenciana procederá a la restauración de 38 tumbas masónicas en el Cementerio Histórico de Buñol. El Ayuntamiento solicitó ayuda urgente a la Generalitat para evitar la pérdida de las lápidas y símbolos masónicos del siglo XIX. A diferencia del estado de conservación del patrimonio artístico y cultural católico, en este ocasión la Dirección General de Cultura se ha mostrado muy receptiva a la recuperación de este bien patrimonial de Buñol.
Este cementerio, que posee 435 tumbas con simbología masónica, fue creado en 1886 por Joaquín Ballester, alcalde de la ciudad, cuya tumba es la más antigua del cementerio.
Según la Dirección General de Cultura un sector de 30 nichos tiene un riego inminente de desprendimiento, por lo que es necesario acometer con urgencia las obras para su conservación. Actualmente el cementerio de Buñol tiene reconocida la protección patrimonial de Bien de Relevancia Local.El coste de la restauración ascenderá a los 48.395 euros.
Con esta medida el Gobierno Valenciano ha mostrado una sensibilidad ante los masones que no ha manifestado ante los católicos, pues actualmente la Comunidad Valenciana está inmersa en un proceso de eliminación de símbolos cristianos de las calles y lugares públicos.