Rocío Ruiz, nueva consejera de Igualdad de la Junta de Andalucía, que es del partido Ciudadanos, dijo cosas horribles como que la Semana Santa »es un entretenimiento de la plebe» o que las figuras de la Virgen y Jesucristo son »enormes trozos de madera decorados con costosos vestidos». Cuando lo leí se me pusieron los pelos como escarpias.
Encima, nada menos que se le da la consejería de Igualdad, esa que lo único que impulsa por todo el país es la absurda ideología de género.
Después de haber dicho las barbaridades que dijo sobre la Semana Santa y la ofensa con ello a la religión Católica, esta mujer no debería haber sido nombrada consejera de nada, ni ella de aceptarlo. Pero los cargos son lucrativos y son difíciles de no aceptar por parte de la mayoría de nuestros políticos parece ser.
También debemos reconocer que algunos políticos de este nuestro país con tal de salir en los medios y »chupar cámara» les da igual ya a quien ofender. Son minutos de gloria para ellos. Que nos lo digan a los cántabros con el »pelmazo» del señor Revilla.
Creo que dicen que ya ha pedido disculpas. Para mi, tarde. Hay que pensar antes de hablar señora Rocío Ruiz.
Aún así, no nos tiene que sorprender que alguien como, por ejemplo de Ciudadanos, ataque fiestas cristianas. El presidente de ese partido es un masón reconocido con tratos con masones reconocidos también. Sólo hay que ver también el símbolo de ese partido, el ojo (la C) y la pirámide debajo. Y ya sabemos que la masonería internacional está en contra de la religión Católica desde hace siglos.
En un Estado en el cual la religión oficial sería la Católica esta señora no hubiese ni despegado los labios por miedo a una dura amonestación por parte de un gobierno. Pero en un Estado liberal y aconfesional como este parece que está permitido dar palos a la religión, sobre todo a la Católica, sin apenas respuesta y más teniendo hoy en día el gobierno del »okupa» y agente de Bilderberg, Sánchez.