Los Guardia Civiles se encontraban paseando por la localidad de Albal el pasado 22 de este mes, cuando observaron cómo salía humo negro de la ventana de una vivienda, así como a varias menores gritando y pidiendo auxilio
Ante tal hecho uno de los agentes, sale corriendo hacia el interior del edificio mientras que el otro avisa telefónicamente al Centro de Operaciones y Servicios de la Guardia Civil para comunicar la situación.
Una vez en el interior del edificio el agente antes mencionado intentó apagar el humo junto con un vecino de la finca con un extintor.
Ante la poca visibilidad producida por el humo y la toxicidad del mismo deciden ir reptando a lo largo del rellano, gritando para intentar localizar a la gente que estaba en las viviendas y poder evacuarlas.
Pese a la gran dificultad y peligrosidad producida por el humo, el gran calor, la nula visibilidad y la posibilidad de que pudiera producirse alguna explosión por escape de gas u otra circunstancia, se consigue acceder a algunas de las viviendas y evacuar a cinco personas (menores y mayores de edad) y a dos perros que se encontraban en el lugar, dirigiendo a todos ellos a la vía pública.
Posteriormente llegan al lugar dos patrullas de de la Guardia Civil de Paiporta, una patrulla de la Policía Local de Albal, una dotación de Bomberos y un SAMUR.
Se desalojan unos 15 vecinos siendo como consecuencia del incendio atendidos por ataques de ansiedad e inhalación de humo 8 de ellos, entre los que se encuentran uno de los Guardia Civiles.
Gracias a la rápida actuación de estos Guardia Civiles se pudo evitar un mal mayor.