La Gran Logia Simbólica de Paraguay ha roto su sepulcral silencio para tratar de desvincularse de la red de narcotráfico que lideraba el brasileño Sergio de Arruda, alias Minotaruo.
Ante la aparición del compás y la escuadra en los ladrillos de cocaína incautados el pasado 6 de febrero en Yby Yaú (Paraguay), pertenecientes al conocido narco, la Gran Logia Simbólica del Paraguay emitió un comunicado para tratar de justificar que Sergio de Arruda no es uno de sus miembros.
Los cuerpos y fuerzas de seguridad de Paragua incautaron un alijo formado por 2.040 ladrillos de cocaína (con un peso de 2.199 kilos). En los ladrillos figuraban de forma clara el logo de los masones.
Es necesario recordar que la masonería internacional ha estado vinculada a lo largo de la historia con numerosos casos de corrupción y con prácticas delictivas. En este sentido resulta esclarecedor recordar las Conclusiones del Informe de la Comisión Antimafia, aprobado en el parlamento italiano el pasado 21 de diciembre de 2017. En dicho informe se constataba la relación entre la masonería y la Ndrangheta y la Cosa Nostra en Calabria y Sicilia. El caso de Castelvetrano, un municipio siciliano de 30.000 habitantes, con seis logias masónicas, puede ayudar a entender la situación. En la gestión del ayuntamiento, cuatro de los cinco asesores municipales formaban parte de la masonería, así como siete concejales de los 30 que formaban parte de la junta. Esta infiltración masónica en Castelvetrano salió a la luz en el curso de una investigación sobre corrupción en el reciclaje de residuos en toda la provincia. Los masones de este municipio no son más que un botón de muestra de una relación que desbordó a los investigadores. El informe de la Comisión Antimafia referia 193 casos de personas con antecedentes penales por asociación mafiosa en Sicilia y Calabria, durante los últimos 25 años, que formaban parte de logias masónicas.
Aunque sin duda uno de los escándalos más graves en los que ha estado implicada la masonería internacional fue el vivido por la democracia italiana en el caso conocido como el de la Logia P2, escándalo en el que la sociedad italiana descubrió que a esta logia pertenecían numerosas personalidades que ocupaban cargos relevantes, en la política, el ejército y los medios de comunicación, y que dicho logia poseía una agenda secreta para transformas las instituciones italianas. Dicha logia operó en Italia desde el año 1877 hasta 1981.
La aparición de este alijo de cocaína ha obligado a Édgar Sánchez, gran maestro de la Logia Simbólica del Paraguay, a emitir un comunicado en el que asegura que Minotauro “no pertenece” a los registros de la logia a su cargo.
No obstante agentes de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) siguen investigando el origen de la droga, y las posibles relaciones del conocido narcotraficante. Tras la incautación, el fiscal de la Unidad Especializada en el Combate al Narcotráfico en Pedro Juan Caballero, Armando Cantero, explicó que la carga (de 64 bolsas de cocaína) estaba distribuida en dos camionetas, una Ford F250 gris, con matrícula UAJ 307, y una Toyota Hilux de color blanco, sin matrícula, cuyos conductores las abandonaron para huir y entrar a un monte.
En la operación desarrollada el día 6 de febrero se detuvo a tres sospechosos, Pánfilo Barrios, Mario Ramón Ibáñez López y Sandra Zunilda Coronel, continuándose al día siguiente con 13 detenciones más y con la incautación de varios vehículos, armas de fuego y teléfonos móviles.
Reproducimos el comunicado emitido por la Gran Logia Simbólica de Paraguay.