Lo he dicho siempre, la familia es el »eje» principal de la vida y de una nación. La familia es un baluarte, una última línea de defensa y como desaparezca, estaremos completamente a merced de cierta gente diabólica que pretende destruirla para dominar completamente al ser humano y con ello el mundo.
Seamos claros, las asociaciones feministas radicales y el movimiento LGBT están financiados todos por la criptocracia para acabar con la familia, y con ello con la sociedad. Por eso soy de la opinión de que el Estado debería prohibir todo ese tipo de asociaciones y movimientos.
Por medio de las asociaciones feministas radicales se engaña y manipula a ciertas mujeres para que crean que están protegiendo o avanzado en sus derechos, cuando desgraciadamente es todo lo contrario, se están degradando y destruyéndolo todo de paso.
Quieren también convertir a las mujeres en verdaderas déspotas con los hombres, utilizando como arma contra ellos leyes verdaderamente tontas e incluso falsas denuncias. Esa es una de las claves de destrucción familiar: provocar »grescas» ridículas y sin sentido entre el hombre y la mujer, destruyendo la familia desde dentro.
Luego está el movimiento LGBT. Lo he dicho también otras veces, la homosexualidad sigue siendo considerada por la ciencia en general una enfermedad mental llamada disforia de género. El problema es que hace 30 años aproximadamente la »Organización Mundial de la Salud», que es también una especie de rama de la ONU, la borró de su lista de enfermedades mentales, pero por presiones, no por ninguna demostración científica. Sólo el 0,001% nacen homosexuales y según los expertos sería por una »mutación genética anómala». Ese mismo estudio dice también que el 99,99% de los homosexuales son por casos de neurosis.
Resumiendo. Siempre lo digo, a esos poderes mundiales diabólicos les interesa crear un mundo de masas incultas, informes, sin identidad, para poder controlarnos mejor y así implantar más fácilmente su infierno en la Tierra, es decir, el llamado NOM, el »Nuevo Orden Mundial».