En plena época de crisis, una start up catalana consigue financiación millonaria por parte de algunos grandes fondos de inversión mundiales. ¿Su campo? la automatización de los procesos electorales. ¿Por qué los grandes capitalistas van a estar interesados en un campo con tan poco negocio como el de los procesos electorales? la respuesta la hemos vivido la semana pasada, cuando las elecciones a la Cámara de Comercio de Barcelona se decantaron a favor de los independentistas, entre clamorosas evidencias de pucherazo, reflejadas en El Confidencial (igualmente el diario elindependiente.com se hacía eco del pucherazo).
Penetrar en la tecnología y la financiación de Scytl es adentrarse en lo más oscuro del mito democrático: los zorros (los fondos de inversión) cuidando de las gallinas (la representación popular). Nauta Capital, Balderton Capital y Spinnanker SCR son los fondos que se hicieron con el control de la empresa barcelonesa.
En el año 2010, Scytl compró el software SOE, que participó en las elecciones norteamericanas al lado de la empresa de Hardware Diebold, que demostró había sido utilizada para generar fraude electoral.
El director de operaciones de Nauta en Estados Unidos, Dominique Endicott, trabajó para la empresa Booz Allen Hamilton, propiedad del Grupo Carlyle, de la familia Bush; el ex jefe de la NS, Clapper; el ex director de la CIA, Woolsey; el ex director de la NSA, McConnell y el ex director de la secretísima NRO, Keith Hall.
Endicott ha dirigido una de las empresas hermanas de Scytd, Nauta, que compró el software especializado en espionaje digital y a través de telefonía móvil, CarrierIQ, con la que pretende desarrollar una tecnología para el voto a través del móvil. El actual presidente de Scytl, Pere Valles, viene de la potentísima consultora capitalista KPMG. Su vicepresident, Jordi Puiggali, apareció hace pocos años en El País ponderando las virtudes de la blockchain para la contabilización del voto, pero no una blockchain descentralizada (en donde los ciudadanos podrían validar el proceso electoral) sino centralizada, porque, según él. «seria más rápido el conteo». De esa manera, el código fuente del corteo puede ser programado y manipulado, como presuntamente ha sucedido en las elecciones de la Cámara de Comercio Catalana
En resumen: la democracia está, ahora más que nunca, en las manos de los capitalistas. Son ellos los que realizan el recuento de votos.
Manifestaciones en toda España contra el pucherazo electoral
Fuente: freepress.org