Aunque Pablo Iglesias haya conseguido tomar ciertas riendas del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), cierto es que en la formación comunista no ha sido de buen recibo que ninguno de sus ministros forme parte del mando único dictado con motivo del Estado de Alarma.
Podría hablarse de una enésima lucha de poder entre el PSOE y PODEMOS, aunque estos últimos hayan votado tan a favor de la prórroga de las medidas del decreto-ley de cuarentena masiva como la «derecha opositora». De hecho, cierto es que PODEMOS no está «haciendo sangre» contra Sánchez de puertas hacia afuera.
Ante ello, hay gente que, sin ser necesariamente muy izquierdista, temería una crisis de gobierno en plena época epidémica mientras que otros llaman a un gobierno de concentración que, al menos, involucre al PP, pero sin contar con PODEMOS en ningún caso. No obstante, de pequeños sondeos tuiteros se desprende lo siguiente:
¿Cuál de los siguientes escenarios políticos considerarías más conveniente para España (prescindiendo de #UnidasPandemias)?
🤔🤔— Grupos de Propaganda – CTC (@gpropagandaCTC) March 20, 2020
¿Les preocuparía que una fricción entre Sánchez e Iglesias hiciera caer el gobierno central?
🤔— Editorial Tradicionalista (@Tradicion_Viva) March 25, 2020
Las muestras no son muy numerosas, pero sí que es cierto que, al menos, en redes sociales, hay quienes sostienen la políticamente incorrecta posición de desconfiar del gobierno o de cuestionar directamente la existencia del Estado (aquí se tiene claro que la sociedad ha de ser activa y vigilante, que nuestras libertades peligran).
Pero, aunque no se incurra en un economicismo absoluto, dado que la preocupación por las medidas contempladas en torno al Estado de Alarma se debe a nuestra defensa de la soberanía social y el orden natural de origen y creación divina, sí que conviene advertir de las consecuencias económicas del estrangulamiento social.
Escenarios económicos en España, en plena crisis del COVID-19
Para ello, vamos a citar, en esta ocasión, una serie de escenarios previstos o posibles para España, con motivo de la crisis desatada en torno al COVID-19 (aunque el mercado laboral ya estaba dando señales de alarma hace meses y la eurocracia bancaria lleva años ocultando una recesión).
Esos escenarios, a citar a continuación, son los que se enuncian en un informe recién publicado por Foro Regulación Inteligente, un think-tank español presidido por el periodista económico Diego Sánchez de la Cruz, cuyo fin es promover la simplificación de los procesos normativos y la eliminación de burocracia.
La relación es la siguiente:
- Si a comienzos de marzo se hubiesen tomado medidas de aislamiento social y/o de monitorización masiva de los contagios, la estimación de caída del PIB sería menor (caída del 1%‐2% del PIB con recuperación de la normalidad económica a comienzos de mayo).
- El escenario de una «crisis en V”, es decir, con un rebote relativamente rápido, parece poco probable. La economía española necesitará al menos un año para recuperar los niveles de producción que se estaban contemplando antes del 2 coronavirus. Por lo tanto, se plantea una “crisis en U”, con una fuerte caída del PIB en el primer semestre de 2020 y una aceleración progresiva durante el resto del año.
- La pandemia podría saldarse con una reducción del empleo equivalente a 1,5 millones de puestos de trabajo, el grueso de ellos concentrados en los sector smás directamente afectados (caso del turismo o del comercio). Sin embargo, parte de esa ocupación puede recuperarse en la segunda mitad del año.
- Son necesarias medidas más agresivas que eviten el colapso de empresas y autónomos.
- Las decisiones anunciadas por el Banco Central Europeo disipan la amenaza de una crisis fiscal a corto plazo y permitirán financiar un déficit público que, previsiblemente, se duplicará o triplicará respecto a los niveles de 2018 y 2019 (alcanzando, pues, cotas comprendidas entre el 6% y el 9% del PIB)