En pocos días, los españoles habrán pasado ya un mes de «confinamiento masivo forzoso», en el que, con el pretexto del coronavirus codificado como COVID-19, tienen que permanecer en sus domicilios salvo casos puntuales (y sí, el Estado de Alarma se ha prorrogado).

Pese a que la lectura e Internet en general están haciendo de esta seria vulneración de libertades como la de circulación, los españoles han sido tanto víctimas de una desesperación que incluso se debe a motivos económicos como testigos de un continuo agitprop mediático y virtual (aunque no todos sean conscientes).

Estos ven, por ejemplo, cómo los niveles de desempleo crecen de manera drástica (pese a determinados sesgos y maquillajes estadísticos) y que la mala comunicación de Moncloa es tan negligente como mentirosa. Pero es que hay políticos que van más allá con sus promesas, no solo limitándose a dar más subsidios.

El alcalde de Cáceres promete «la mayor fiesta de cumpleaños de la historia»

No cabe duda que, dando aún así gracias a los videojuegos y los juguetes físicos, los niños son uno de los sectores de la población que peor puede estar sobrellevando esta situación, a no ser que no tengan un hábito de salida al aire libre, ya sea para socializarse o divertirse sin más.

Así pues, con una intención «embaucadora» y «electoralista», un presunto seguidor partidista de Pedro Sánchez les ha prometido una especie de «macrofestín» adaptado a sus edades, en casco urbano. Es el caso del alcalde de Cáceres, Luis Salaya, perteneciente al PSOE y, en el poder, gracias al apoyo de C’s.

Como se puede leer en ese «bando infantil» en archivo de imagen, es probable que, quizá en verano, la Plaza Mayor de Cáceres sea escenario de lo que llaman «la mayor fiesta de cumpleaños de la historia [de la ciudad]» (con la excusa de «compensar» a quienes, debido al confinamiento, no han podido celebrar sus «cumples» como deseaban).

El cumpleaños, un nuevo «dizque» derecho

El derecho positivo, artificial y más afín al Estado que a lo que nos viene dado y ordenado por Dios, en tanto que es practicado por los políticos actuales, nos tiene acostumbrados a una serie de «derechos» tales como la vivienda, la educación, el subsidio, la cultura…

Bajo ese juego de eufemismos, se presenta lo que viene a ser una coacción a terceros en toda regla (en tanto que se les obliga a financiar con sus impuestos todas esas prestaciones, concedidas en régimen de monopolio, a través del artificio revolucionario del Estado).

Así pues, con ello mismo, podemos decir que, con la intención de hacer que los niños se sientan dependientes del artificio del Estado, se les pretende engatusar con la creación de «macrocumpleaños». Eso sí, recuerda que todo esto lo pagas tú, mientras que sufres la misma coacción y estrangulamiento que el resto de la sociedad.

COMPARTE: