Nuevos documentos dados a conocer revelan que el expresidente de EE.UU., Bill Clinton, mantuvo contacto con “chicas jóvenes” menores de edad en por lo menos una visita a la isla privada del depredador sexual Jeffrey Epstein, donde el magnate, también sindicado como agente del Mossad, organizaba “orgías sexuales” de manera regular. La información también muestra que el Buró Federal de Investigaciones norteamericano (FBI) supo durante años sobre los casos de abuso de menores por parte de Epstein y sus socios. El propio tribunal que sigue el caso contra Ghislaine Maxwell, expareja y socia de Epstein, dio a conocer la cuantiosa información, recopilada en más de dos mil páginas de testimonios.

De acuerdo a los documentos, en una ocasión en la isla privada del proxeneta estuvieron presentes la por entonces menor de edad, y actual querellante, Virginia Giuffre, Epstein, Ghislaine Maxwell, Bill Clinton, una mujer no identificada llamada “Emmy” y “dos chicas jóvenes”. “Sabe, recuerdo haberle preguntado a Jeffrey ‘¿Qué está haciendo Bill Clinton aquí?’ […] y él se rió y dijo ‘bueno, me debe un favor’. Nunca me dijo qué favores eran. Nunca lo supe“, señalan los documentos. “Me dijo hace mucho tiempo que todos le deben favores. Los tenía a todos en sus bolsillos“, expresó la querellante. Giuffre declaró además que vio a Clinton “caminar hacia la oscuridad con dos chicas guapas en cada brazo”. Al ser consultada sobre si las “orgías sexuales” en la isla eran habituales, Giuffre respondió afirmativamente.

Gracias a los archivos dados a conocer por la jueza que entiende en el caso, se ha conocido que el expresidente de Estados Unidos Bill Clinton voló por lo menos en una ocasión con dos chicas a la ya rebautizada “isla de las orgías” del pedófilo, un centro de operaciones de la red de tráfico sexual del Caribe.

Las declaraciones confirman el uso continuado que Bill Clinton le dio al avión privado de Epstein, el Lolita Express. De hecho el nombre del expresidente aparece en varias ocasiones los listados privados de viajes del avión acompañado por lo que aparece escrito como “mujeres”.

Ghislaine Maxwell, la socia de Epstein, ordenó a Virginia Giuffre tener relaciones sexuales con, entre otros personajes conocidos del mundo político y empresarial:

– Príncipe Andrew de Gran Bretaña
– Alan Dershowitz (jurista)
– Glenn Dubin (empresario, fundador de Highbridge Capital Management y Robin Hood Foundation)
– Jean Luc Brunel (director de una agencia de modelos francesa)

– Bill Richardson (político estadounidense, y exgobernador del estado de Nuevo México)
– Marvin Minsky (científico estadounidense. Es considerado uno de los padres de la inteligencia artificial. Fue cofundador del laboratorio de inteligencia artificial del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT))

Epstein habría obligado también a Giuffre, mientras era menor de edad, a tener relaciones sexuales con el príncipe Andrés, hijo de la reina Isabel II de Gran Bretaña, para lograr “material incriminatorio” para usar como chantaje en al menos tres ocasiones: en el piso de Ghislaine Maxwell en Londres, en la isla privada del magnate y en su casa en Nueva York.

En el encuentro en la isla, Epstein ordenó a Giuffre que “le proporcionara al príncipe lo que él le pidiera e informara [a Epstein] sobre los detalles del abuso sexual”. Maxwell “facilitó los actos de abuso sexual” de Epstein.

El proxeneta traficó a Giuffre, que entonces era menor de edad, con personas poderosas para “congraciarse con ellas a cambio de beneficios comerciales, personales, políticos y financieros, así como para obtener información potencial de chantaje”, entre las que se encontraban “numerosos prominentes políticos estadounidenses, poderosos ejecutivos de negocios, presidentes extranjeros, un conocido primer ministro y otros líderes mundiales”.

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El actual presidente de EE.UU., Donald Trump, también aparece en los documentos revelados, sin embargo, Giuffre sostuvo que mientras Trump y Epstein eran “buenos amigos”, Trump no intentó “ligar” con ella.

En otro testimonio, Giuffre relató las orgías “continuas” en las que Maxwell estuvo involucrada en la isla privada de Epstein, con chicas que tenían “entre los 15 y los 21 años”, adolescentes y jóvenes que fueron trasladadas en un avión privado para participar en las prácticas sexuales grupales que tenían lugar en todo el territorio de la isla. Cuando se le pidió que describiera a las chicas, respondió: “Hay tantas, que no sé por dónde quiere que empiece”.

En la lista negra de contactos de Epstein figuraban multitud de altos políticos y poderosos empresarios, entre ellos David Rockefeller, Bill Gates, Tony Blair, Michael Bloomberg, Ehud Barak, Henry Kissinger, Edgar Bronfman Jr, Edouard y Evelyn de Rothschild.

En agosto de 2019 Jeffrey Epstein fue encontrado “suicidado” en la cárcel de Nueva York antes de poder ser juzgado. Ghislaine Maxwell permanece detenida y enfrenta hasta 35 años en prisión si es declarada culpable. En lo que a todas luces es otro acto propio de la mafia, el hijo de la jueza federal hispana Esther Salas, que investiga las cuentas de Epstein, fue asesinado en un ataque armado a su casa, aún sin aclarar.

Esta noticia fue publicada por primera vez en el diario argentino Kontrainfo.com

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