Comentaba en el anterior artículo que la nueva Anormalidad, consecuencia de la agenda del N.O.M, había fagocitado todo tipo de institución, ente, ya fuera Pública, Privada, plural o singular. Resumía cuales eran “ los detalles” que delataban el erróneo camino tomado por la Iglesia, como fruto de sumisión al dictado globalista, o sea, del Mundo.

Hoy el turno de análisis, dentro de la cola de instituciones que se agolpan a las puertas de mi escritorio, y que esperan con ceño fruncido a que les enmiende la plana, es una institución que otrora escribió con letras de sangre y oro el nombre de España en la historia universal; salvó en numerosas ocasiones al Occidente cristiano del pacifismo islámico y dio al ejército invasor de la “ legalité, liberté y Fraternité” a probar la tortilla de patatas, el filo de la navaja albaceteña, el trabuco de Sierra Morena y el carácter de la mujer española  en“ fase de cabreo”. Sus hazañas impresas en libros y plasmadas en lienzo provocaron la envidia del mundo entero, obviamente me refiero al Ejército Español.

Pasaron los siglos, cayeron las hojas en otoño y en primavera florecían los almendros ( las almendras, que seguían siendo las mismas, hoy tienen denominación de origen, son ecológicas y su uso es sostenible, curiosidades de la modernidad). Tras la iluminada decisión del Charlot del P.P de eliminar la “ mili”, los asesinatos selectivos de la banda terrorista E.T.A y la limpieza de ciertos mandos, esta institución armada se limitó a defendernos de los desastres naturales ( obviamente causados por el cambio climático, aunque entre los materiales se encontrara algún bidón de gasolina y algunas colillas) a curtirse en misiones humanitarias a miles de kilómetros, mientras nuestras fronteras son asaltadas por un ejército de refugiados bien alimentados que huyen de un opresor cuyo nombre desconocen ( cuando menos , curioso). Todo esto con la inestimable complicidad de los gobernantes de España ( perdón, Escombro) que al igual que algunos reyes godos facilitaron la invasión morisca de nuestra Península. No quisiera obviar el trabajo “altruista” de las ONG de “negreros sin fronteras”, subvencionadas entre otros por el especulador Soros.

Hay que recordar la gran aportación de la U.M.E en la vigilancia al confinamiento impuesto por una pandemia creada por una élite que alberga brillantes beneficios propios y oscuros deseos para el resto de plebeyos.

Es obvio que el Ejército español del siglo XXI necesita adaptarse con urgencia a los nuevos retos de esta Nueva Anormalidad con lo que me permito ciertas sugerencias que mejorarían su nueva identidad.

En primer lugar hay que crear una Compañía de Operaciones Especiales Gays que podrían denominarse “ las Nancys furiosas” con un ardoroso himno compuesto por Paco Clavel con el título “Lujuria guerrera”, una exquisita fusión entre un pasodoble , la danza del vientre y bachata. Abriendo desfiles y actos conmemorativos  la agrupación “Chorlito de Huelva” contaría con la participación de “drags Queens”, muy purpurinadas, piquetes sindicales al cargo de la percusión ( cencerros, silbatos y vuvuzelas) y el colectivo asambleario de Perros Flautas, aporreando tambores, que nos obsequiaran con malabares , el baile de las rastas y el vaivén del diávolo. En lo que se a refiere a “limpiar”, Mr .Proper  que debe de estar en un asilo, será sustituido por un selecto grupo de Bosnias “limpia” carteras, documentos , microchips y víveres del enemigo,

En el apartado de Efectivos Sanitarios se ha de integrar el multiculturalismo en dichas atenciones en el campo de batalla ; así la colaboración de “chamanes del antiplano”, “ Hechiceros del Alto Volta y chinos dedicados a la acupuntura, podría dar a elegir que tipo de atención solicita el herido, si el “poniendoscopio”, la vara con pluma y huesitos de pollo., el humo del porro o el mescal chamánico, o la aguja del “ acupuntol”. Un proyecto de investigación sobre materiales  de super blindaje en tanques podría lograse sintetizando las células del rostro de los políticos.

Para abaratar costes en el apartado de bombas y misiles estos se podrían sustituir por escombros. Esta medida no solo economiza sino que a nivel psicológico presenciar el bombardeo sobre una ciudad en la que caen del cielo bañeras, bidés, ladrillos, tuberías de plomos, etc, es bastante desconcertante  porque aunque no produzcan tanta destrucción, no menos doloroso es que te caiga un inodoro en la cabeza. Con la idea de sufragar gastos la idea “Apadrina” podría sufragar los gastos de los miembros de las FAS. Por un módico precio al mes se recibiría una foto del soldado o soldada apadrinado en posición de combate y disfrutar en un CD la narración de sus vivencias. Otro plan de Sponsorización “ tu empresa amiga”, busca la implicación de la mediana y pequeña empresa.

De esta forma la sección de francotiradores podría llevar la propaganda de “ulloas ópticos”, la Unidad de Intervención Rápida por la franquicia “a todo galope “, la Unidad de Paracaidistas “Red bull, te da alas”. Y para acabar con las sugerencias no se olviden de cambiar el rótulo “ todo por la Patria” por “todo por la Pasta” que pende sobre los cuarteles, pues al igual entra en las exigencias de “ memoria histérica”.

Hoy, quienes juraron defender la unidad de la Patria y la Constitución, sufren de un ataque de amnesia o cobardía. Hoy el toque de Diana Floreada ha mutado convirtiéndose en “Floripondia”.

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