Querido Lector, ¿quiere que le cuente algo que lo haga reír? Mire que ha de morirse de risa eh… (Modo irónico: Activado)

Juan es un joven de 18 años que acude al ayuntamiento (edificio municipal) para solicitar su licencia de conducir. Tras requerirle una buena cantidad de papeles y estudios psicofísicos, le dicen que tiene que realizar un curso previo, con examen incluido. A lo que responde afirmativamente.

Luego de llevarse a su casa todos los papeles, la curiosidad sobre del material de estudios, hace que se ponga a leerlos. Y allí encuentra algunas directrices y preguntas de estudio. Algunas decían así:

P. ¿Qué es el patriarcado?
R. es un sistema que estructura la desigualdad entre los géneros y lo hace de manera regulada y sistemática. Tiene como causa principal la jerarquía masculina por sobre los demás géneros.

P. ¿Qué es la identidad de género?
R. refleja un sentido profundo y experimentado del propio género, comprendido desde la vivencia interna e individual de cada persona.

P. ¿Cuándo una mujer es invisible?
R. cuando son excluidas de una realidad en la que son parte activa. Por ejemplo, cuando no aparecen datos estadísticos desagregados por género.

Juan quedó perplejo, no entendía el por qué esas preguntas y respuestas. ¿Qué tendría que ver una cosa con la otra? -pensó-. Entonces se dijo así mismo, ¿para obtener mi licencia de conducir tengo que estudiar perspectiva de género? ¡Esto es de locos! Y sí, Juan tenía razón.

¿Le gustó el cuento?
¿Y si le digo que en Argentina es lo que está por suceder? Sí, créalo. Para poder acceder a una licencia de conducir, ahora se debe estudiar perspectiva de género. Esto es parte de la acción del gobierno socialista, programar cerebros. Hoy parece una locura, pero, dentro de 15 años, esa locura será parte de la realidad y ya no se la verá como tal. Las generaciones futuras crecerán con esto, y sus cerebros ya estarán programados.

Estamos contaminados por todas partes, nos programan, no a nosotros, sino a nuestros hijos y a los hijos de ellos. ¿Se acuerda Usted, mi querido lector, cuando en los distintos países, los estados se enorgullecían de favorecer el divorcio sobre la unión familiar? Hoy, el divorcio no es un tema a tratar, ya pasó y nuestros cerebros fueron programados para que, hoy día, sea algo natural. ¿Se percató del resultado? De cada 10 casamientos, 7 se divorcian. ¿Un 70%? Y sí…

El fruto de eso, se ve en los jóvenes de hoy. ¿Se imagina los jóvenes del mañana?

Todo esto es una programación de cerebros, es decir, gota a gota se llena un vaso. Nosotros vemos las gotas y nos asombramos de que tal o cual cosa suceda. Divorcio, Homosexualidad, Aborto, Transexualismo y Transvestismo, Eutanasia, Identidad de género, etc., son gotas en un vaso. Dentro de 15 años o 20, todo eso habrá colmado el vaso, y los futuros jóvenes verán el vaso lleno y no se interrogarán nada, será lo normal para ellos, pues serán hijos de este mundo.

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No crea, querido lector, todo lo que le dicen los políticos, pues gobiernan para su propio beneficio y el de sus amigos, las corporaciones.
Recuerde, como buen católico que debe ser, le digo con Jesús, nuestro Rey y al único que debemos obediencia: «Usted no es de este mundo», no se deje programar, no sea un autómata que vaga por a vida repitiendo lo que los políticos de turno le hacen creer.

Yo, seguiré repitiendo en mis artículos la siguiente frase: ¿Qué se viene? Vamos, piense en algo loco, seguro sucederá.
Créame, cada día me veo más sorprendido por este mundo, que no deja, valga la redundancia, de sorprenderme.

Viva Cristo Rey, el único que no defrauda.

Fuente: Diario la Capital

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