Quizás haya llegado el momento de que los carlistas se vuelvan a presentar a las elecciones defendiendo un orden auténticamente cristiano frente al desorden luciferino que nos desgobierna a todos, los tradicionalistas y los anarquistas han sido los únicos que se han resistido a la tiranía pseudo científica (o sea a la religión satánica disfrazada de ciencia), los únicos que no se han tragado el cuento chino de la farsa asesina. Deberían apresurarse a capitalizar su resistencia frente a los políticos colaboracionistas porque todo el sistema neo liberal va a derrumbarse dentro de poco ya sea por el peso de sus culpas y errores o porque tras la campaña eugenésica de vacunación no quedará ya nadie a quien gobernar, nos habrán exterminado a todos. Puesto que los anarquistas se niegan a gobernar o a ser gobernados, y son bastante ingobernables sólo nos quedan de momento como posibles gobernantes los carlistas y quizás los representantes de las organizaciones de consumidores como Scabelum que consciente o inconscientemente se han dado cuenta que lo único que somos ya los pobres mortales para el macro estado globalista es consumidores. Los que puedan consumir, por supuesto, que dentro de poco sólo serán los chinos; los demás seremos consumidos. Por cierto que algunos funcionarios de la ONU acaban de ser acusados de delatar a disidentes chinos al gobierno chino comunista, y es que la ONU y el apparáchick chino son prácticamente lo mismo. Tanto monta monta tanto Xi Jinping como Henry Kissinger. Las primeras víctimas del gobierno chino globalista son los chinos por supuesto. Se cuentan horrores de sus abusos, pero lo que llega a los oídos occidentales no es más que la décima parte de lo que se cuece en ese inmenso y tiranizado país.

Si los masones han tenido tanto éxito en política ha sido porque dominan los resortes de la propaganda y de la manipulación mental que ahora ha pasado a ser genética, incuban golpes de estado disfrazados de emergencia sanitaria, monstruos de laboratorio, y dictadores genocidas de izquierda y de derecha.

La democracia cristiana probablemente no fue más que un tímido intento de luchar desde dentro contra el sistema político totalitario y gnóstico engendrado por los masones a golpe de magnicidio y revoluciones esotéricas que fracasó desde el principio, el trágico destino de Aldo Moro es muy revelador, le dio por dialogar con los comunistas europeos y fue eliminado por la CIA, los banqueros sabateos de la City de Londres ya habían dividido el mundo entre el comunismo soviético oriental y las pseudo democracias capitalistas occidentales con su sistema bipartidista con que se camuflaba al partido único que reina desde la Segunda Guerra Mundial: el globalista.

Aldo Moro fue probablemente el único cristiano de la democracia cristiana que ni es demócrata ni cristiana, por eso fue asesinado por la CIA sionista, cabalista y masónica, aliada con la mafia que es su brazo por así decirlo “proletario”. Previamente había sido amenazado o chantajeado por Henry Kissinger, el premio nobel de la paz experto en provocar guerras y carnicerías de todo tipo. La mafia es desde luego una organización masónica aliada con el estado profundo y si no fue fundada por el masón Giuseppe Mazzini, lo sería por algún otro como él.

El asesinato de Aldo Moro se atribuyó falsamente a las Brigadas Rojas (infiltradas como la mayoría de las organizaciones terroristas por los agentes de la CIA), cuyos miembros se reunían en la escuela de idiomas Hiperión, la misma que frecuentaban los terroristas de ETA para aprender a fabricar bombas en inglés. La mayoría no sabía que no eran más que los peones de la CIA y el Mossad.

Aldo Moro pasó su cautividad en un apartamento propiedad del SISMI, la agencia militar de Italia y las balas con las que lo acribillaron habían sido tratadas con la misma pintura de conservación especial que exhibían las municiones encontradas en los vertederos de armas de la red terrorista y masona Gladio.

Moro fue reemplazado por el títere de la banca masónica y mafiosa Giulio Andreotti que se mostró dispuesto a dialogar tan sólo con la CIA: o sea a escuchar sus instrucciones y a callarse la boca.

No tiene nada de extraño que el intento de Aldo Moro de colaborar con los euro comunistas y formar un gobierno de coalición nacional fuera denunciado tanto por los Estados Unidos como por la Unión Soviética, o sea por el ala derecha y el ala izquierda del gobierno mundial satanista en aquel momento en ciernes. La palabra nacional pone los pelos de punta a los banqueros masones que no toleran más nación que el estado sabateo que no judío de Israel (los judíos ortodoxos en Israel están de adorno y se limitan a lamentarse constantemente frente al muro de las lamentaciones). Ahora probablemente hayan decidido exterminarlos por medio de las vacunas como a todos los demás.

Uno no sabe quién es más capitalista, si los capitalistas o los comunistas, todos adoran el capital robado del gran banco central mundial y no conocen más autoridad que la del dinero, el nuevo rey desnudo, digital o invisible, que no necesita ropa para cubrirse porque no se le ve, desaparece de los bolsillos por arte de magia negra y va a parar a los bolsillos de las élites carroñeras y sus serviles servidores los políticos masones del estado global que están a punto de reventar.

La estrategia publicitaria de los ingenieros sociales como los miembros de la sociedad eugenésica y “socialista” fabiana de asociar falsamente la justicia social y los intereses de los trabajadores con el comunismo o el socialismo tuvo tantísimo éxito que surgían por doquiera de forma espontánea movimientos de inspiración comunista o socialista que no estaban bajo el control de la banca anglosajona. Por mucho que los servicios de inteligencia del sionismo anglo sajón introdujeran a sus agentes en los partidos comunistas occidentales éstos resultaban difíciles de controlar en los países con ciertas garantías constitucionales. En la Unión Soviética era otra cosa, allí existía un régimen totalitario y una estructura de mando rígida (o sea masónica); con colocar a sus agentes en lo más alto de la cadena de mando controlaban todo el país, pero los comunistas y los socialistas del resto de Europa iban más por su cuenta, no estaban tan sujetos a los intereses de las corporaciones anglosajonas que dictaban las políticas económicas soviéticas y diseñaban los planes quincenales de la URSS; se trataba de una economía completamente dirigida por financieros como los Rothschild, cosa que no sucedía todavía en Occidente. Ahora es cuando se ha hecho realidad su sueño de control absoluto de la economía mundial gracias a que el Banco Central Europeo, la Reserva Federal y el Banco Central Chino están en manos de un puñado de familias que se reúnen en las instalaciones del Bohemian Grove para celebrar sus aquelarres y sus bacanales. Es el sucesor del Club Hellfire británico cuyo nombre no puede ser más revelador.

La Unión Democrática Cristiana de la Mérkel es tan cristiana como los cátaros o como los adeptos a la Ecclesia Gnostica Chatolica del satanista Aleister Crowley. Se trata de un cristianismo provisional y de pega, destinado a neutralizar a los cristianos en tanto que se acaba de fraguar la tiranía satánica o sionista con la ayuda de los terroristas drogados y descerebrados de Daesh. Es tan cristiana como Nancy Pelosi que no puede comulgar con Jesucristo porque se lo impide el tapabocas, que no le impide sin embargo proferir todo tipo de barbaridades aunque su voz suene así un poco como en off, más parecida a la de un atracador de banco con verdugo que a la de un político. Ahora que los bancos ya no tienen efectivo, los atracadores de banco se tienen que dedicar a la política, es decir a trabajar para la banca apátrida que nos atraca a todos. Los bancos están además vacíos, han despedido a la mayoría de sus empleados y tenemos que entendernos no con la cajera sino con el cajero automático. Se trata de la inteligencia artificial en la que descuella China; y es que todavía no han conseguido del todo convertir en robots a los seres humanos a pesar de todos los esfuerzos que hace la televisión privada disfrazada de pública. En el nuevo régimen satánico todos vamos disfrazados de lo que no somos o todos somos una mera apariencia, una fachada como las de la CIA. Un ectoplasma, un holograma, una inmensa y nauseabunda mentira.

Según la profesora Dolores Cahil, al menos el 30% de los vacunados morirán en pocos meses, algunos lo han hecho a los pocos días. La doctora Tenpenny asegura que millones de personas podrían morir a corto o medio plazo y que sus muertes se atribuirán a una nueva cepa del fantasmagórico virus.

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Las falsas vacunas son la nueva arma de despoblación mundial de los eugenistas del Reino Unido.

La vacuna Oxford-AstraZeneca, que es la más barata, es la destinada a aniquilar a la población de Hispano América, gran parte de Asia y de África, los mismos globalistas genocidas que respaldan movimientos como el Black Lives Matter son los que pretenden ahora a exterminar a los negros de áfrica cuyas vidas les importan tan poco como las de los negros de América.

Vaccitech es la empresa privada que impulsa la vacuna Oxford-AstraZeneca. Los principales inversores de Vaccitech no son otros que Google y el gobierno del Reino Unido. Adrian Hill y Sarah Gilbert, los dos desarrolladores de la vacuna, poseen aproximadamente el 10 por ciento de participación en la empresa y están tratando de hacer que la inyección sea obligatoria anualmente.

Tanto Wellcome Trust (otro instituto genocida pro vacunas) como Adrian Hill comparten una estrecha relación con la sociedad eugenésica más infame de Europa, la Sociedad Británica de Eugenesia, que pasó a llamarse Instituto Galton en 1989 porque la palabra eugenesia se ha vuelto demasiado impopular entre el pueblo a exterminar.

Todos los vacunados debería peregrinar a Lourdes para ver si se salvan de los efectos letales de la falsa vacuna, pero las peregrinaciones a lugares santos están prohibidas. Sólo se puede peregrinar a los alborotos callejeros que subvenciona Soros, que son algo así como las bacanales proletarias del nuevo orden satánico. O las nuevas romerías. Como el exterminio eugenésico de la población mundial parece que va por fases igual todavía se pueden salvar algunos si se niegan a recibir una nueva dosis del veneno “socialista”.

Conforme se afianza el poder de la élite globalista su satanismo se vuelve más manifiesto; ya le erigen estatuas a los machos cabríos en Estados Unidos y las universidades se han convertido en conventículos de brujas y hechiceros donde dentro de poco se estudiará la fórmula de todo tipo de pócimas venenosas, y ungüentos mágicos para que las brujas se unten la entrepierna y puedan volar a los aquelarres; la vacuna del Covid de hecho es lo más parecido al veneno denominado Agua Tofana que existe en la actualidad; algunos aseguran que fue elaborado por los alquimistas rosacruces. Se derriban las cruces en España y dentro de poco se erigirán en su lugar las cruces ansatas egipcias que muchos llevan ya como una especie de amuleto colgado al cuello; uno se ve tentado casi a exigir la reinstauración del Tribunal de la Inquisición, y aquellos a los que habría que colgarle el sambenito serían por supuesto los matasanos que están exterminando a los ciudadanos desprevenidos a cambio de unos cuantos miles de euros que dentro de poco no valdrán nada. Deberían exigir que les pagaran en bitcoins por cada paciente imaginario que matan. La verdad es que autores como Moliere nunca estuvieron de más actualidad, resultan visionarios y adelantados no sólo para su tiempo, sino también para el nuestro. El único escritor que podría reflejar nuestro tiempo presente es Apuleyo. Y los asnos somos todos nosotros aunque no de oro. Somos los hombres convertidos en asnos por la televisión privada (la pública no existe) con los que los usureros sabateos se están haciendo de oro.

Por cierto que el último inquisidor en España fue un masón, o sea que una institución creada para acabar por los cátaros acabó presidida por un cátaro. Poco después se disolvió el tribunal porque su papel lo iba a asumir progresivamente la prensa destinada a perseguir a los cristianos y colgarles el sambenito.

El gobierno multi confesional del Líbano tiene su lógica, aunque no ha funcionado muy bien; no sé si porque los representantes de las diversas confesiones de ese país están igualmente corrompidos o porque tienen que gobernar contra el imperio globalista en la sombra de confesión satánica, y eso es mucho pedir, la verdad. El imperio globalista y su amenaza fantasma es el más corrupto y el más contagioso de la historia y ha extendido la corrupción por el mundo como si fuera una plaga. ¿Pero qué se puede esperar de Satanás?

Cualquier partido o sistema parlamentario antiglobalista debería velar por los intereses de pequeños y medianos empresarios y agricultores y acabar con el trato de favor a las corporaciones apátridas o globalistas como Microsoft o Amazon, que son el mayor enemigo de todas las naciones; la banca debería ser nacionalizada y la Unión Europea desmontada o renovada completamente. Me parece bien que se permita la libre circulación de ciudadanos sin antecedentes penales en los países miembros, ahora los únicos que tienen libre circulación por todas partes son los terroristas de Isis entrenados por la CIA y el Mossad.

El que no debe circular libremente es el dinero robado por los fondos buitre, o al menos que esté tan regulado como las personas. Cuanto más libremente circula el dinero falso del BCE y del FMI menos libremente circulamos los demás. Grandes compañías como MicroStrategy está comprando bitcoins con el dinero prácticamente gratis que le proporciona la Reserva Federal, o sea apostando contra el dólar que los banqueros globalistas quieren reemplazar por alguna criptomoneda tan fantasmagórica como ellos. El bitcoin es el sueño de los mafiosos aliados con los globalistas; no se puede rastrear porque es anónimo y no se puede confiscar. ¿Qué más pueden pedir los ladrones?

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Necesitamos a un niño que nos diga de nuevo que el rey está desnudo, ¿Pero quién es el verdadero rey en pelotas? ¿Pedro Sánchez? Pedro Sánchez es el palanganero de los Rothschild en cuyos deslumbrantes palacios se ruedan películas como “La Novena Puerta”, esa especie de exaltación macabra del demonio disfrazado de mujer estupenda para hacerlo más atractivo a los ojos de los espectadores, o sea de súcubo. Mañana rodarán una segunda parte en algún otro palacio de los Rothschild como por ejemplo el de Buckingham; esta vez con el diablo como protagonista en forma de íncubo para agradar a las espectadoras.

Que Dios nos pille confesados.

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