En los pasados días, el cardenal Robles emitió un duro documento donde establece en la práctica un “comisariado” sobre las actividades de la Fraternidad San Pedro en Guadalajara, México, llegando a suprimir la quasiparroquia que durante años venía ejerciendo allí su apostolado; sin duda empezamos a ver los primeros pasos de lo que es el verdadero objetivo de Traditionis custodes. Un grupo de fieles ha emitido el siguiente comunicado.

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Viernes 24 de septiembre, 2021

Boletín de prensa 

En desamparo quedaron más de 150 familias

Ante el decreto emitido por el Cardenal Francisco Robles Ortega en donde suprime la cuasi parroquia San Pedro en Cadenas, los ahora feligreses que formaban parte de ella, piden ser escuchados y dar marcha atrás al mandato.

Sin diálogo previo por parte del Arzobispado con la Fraternidad Sacerdotal San Pedro (FSSP) ni con los feligreses, fue erradicada la cuasi parroquia que tenía como sede el Templo de Nuestra Señora del Pilar en el centro Histórico de Guadalajara, dejando sin una serie de derechos canónicos y en desamparo a más de 150 familias que formaban parte de ella. 

Dicho mandato fue emitido con la justificación de aplicar el motu proprio Traditionis Custodes (Guardianes de la Tradición) pronunciado por el Papa Francisco en julio de este año, en donde señala una lista de medidas para las celebraciones eucarísticas bajo el Misal Romano de 1962, y dejando a los obispos diocesanos la competencia exclusiva para autorizar, en sus diócesis, el uso de este Misal. 

Cabe señalar que en ninguna parte del documento pontificio se sugiere o manda la supresión de las parroquias o cuasiparroquias que ya estuvieran erigidas bajo el mandato del anterior motu proprio Summorum Pontificum emitido por el papa Benedicto XVI.

Para los ahora ex feligreses, que tomaron por sorpresa la noticia, esta medida tiene la disposición de extinguir la celebración de la Eucaristía según la misa de San Juan XXIII en la arquidiócesis de Gdl, ya que, pese a que, en una rueda de prensa de julio pasado, Robles Ortega señaló que se reuniría con la Fraternidad para entablar un diálogo, esto nunca ocurrió. 

El edicto destruye la obra de más de una década de una devota y vibrante comunidad  y deja a sus fieles con la incertidumbre de quién será el responsable para las celebraciones que menciona dicho documento ya que en él no se ratifican a los sacerdotes de la FSSP como los encargados de la celebración siendo que los sacerdotes de esta congregación religiosa son expertos en estas celebraciones y su carisma y razón de ser es atender a los feligreses que desean la también llamada “Misa Tridentina”. 

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Aunque las celebraciones eucarísticas continuarán, éstas serán limitadas a las ya existentes sin poder realizar misas para alguna boda, algún funeral e incluso primeras comuniones. Además, sólo podrán realizarse en el Templo del Pilar, San Javier de las Colinas y en la capilla de Casa Cristo Rey, lugar donde radican los sacerdotes de la FSSP en Gdl.  

La feligresía teme quedarse sin el rito antiguo que fue utilizado por la Iglesia Católica por más de mil 500 años y que se cambió por el llamado Novus Ordo a partir del Concilio Vaticano II y en donde se utiliza la lengua vernácula, ya que alrededor del mundo algunos obispados han erradicado estas celebraciones en los últimos tiempos. Tal es el caso de la diócesis de Alajuela, Costa Rica donde cancelaron súbitamente la única misa en latín en el país y suspendieron al sacerdote diocesano que la celebraba. 

Pese a estas medidas, que los feligreses señalan como crueles e injustas, ellos han reafirmado su inquebrantable fidelidad y servicio a la Iglesia Católica y al sucesor de San Pedro, esperando ser escuchados por el Cardenal Francisco Robles Ortega. 

FRUTOS

En los poco más de doce años que la FSSP tiene en Gdl muchas personas han retornado a la Iglesia Católica y a la práctica de su Fe gracias a sus apostolados y la comunidad ha dado a la Iglesia cuatro sacerdotes, una religiosa, conversiones y bautizos de adultos no cristianos que siguen un auténtico crecimiento espiritual.
Coetus fidelium de San Pedro en cadenas.

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