(Ahorainformacion.es) – El aventajado político Pedro Sánchez se caracteriza por obtener grandes cosechas de las circunstancias. El presidente ha sabido sacar tajada de la retirada militar norteamericana en Afganistán, recuperando imagen pública con un telefonazo de Biden y, sobre todo, por la labor de un puñado de valientes españoles sobre el terreno. La verdad es que España ha ejercido el vasallaje durante largo tiempo en un lejano país musulmán al que nada nos une. La poderosa Casa Blanca no ha logrado manipular la realidad de que Occidente ha perdido fuerza tras este movimiento en el tablero del mundo, pero la Cristiandad (lo que queda de ella) no ha perdido nada con la liquidación del gobierno afgano-americano. Sin la venia de nadie, Pedro Sánchez se ha presentado en la 76ª Asamblea general de la ONU como un líder abanderado de la «libertad, igualdad y fraternidad» (el demoníaco lema de la revolución) para alertar al mundo entero de que «la democracia está amenazada».

https://www.lamoncloa.gob.es/presidente/actividades/Paginas/2021/220921-sanchez_asamblea_onu.aspx

En el plano interno, la última gran jugada del tahúr Sánchez ha sido el montaje de la esperpéntica y silenciosa «mesa de diálogo Gobierno de España- Generalidad de Catalunya». Su astuta mano ha arrebatado al independentismo la presunta autoridad moral del «diálogo», dividiendo y fracturando a los dos ejércitos separatistas de Junts y Esquerra. La enésima detención de un Puigdemont en caída libre ha insuflado un poco de aire a una figura cada vez más descompuesta y menos honorable. Su fugaz arresto en Italia parece haber sorprendido al negligente equipo sanchista que gobierna España y ha supuesto un nuevo episodio vergonzante más para nuestra patética política exterior, incapaz de contrarrestar los desprecios continuos internacionales, como los recientes de Marruecos y México.

El PSOE está muy desgastado en el ejercicio del poder por la gestión de la pandemia, sus pactos con traidores separatistas y el caso Ghali, pero la férrea mano del infame Sánchez controla eficazmente a los ridículos neocomunistas que le sostienen y a la oposición parlamentaria. El PP es un partido que actualmente carece de alma y liderazgo, con sus dirigentes empujándose entre sí ante la perspectiva cercana de heredar un poder por simple cambio de ciclo, con una Isabel Díaz Ayuso que sabe llamar la atención a las masas. VOX está ahí, haciendo de freno, pero tampoco eso debería ser suficiente para despertar la ilusión de los católicos españoles. Está por ver si su éxito electoral derivado de un discurso de derechas valiente y renovado tendrá progresión futura. La reciente sesión de control al gobierno apenas ha molestado al taimado presidente Sánchez, a quien el diablo le hace explotar un volcán para taparlo casi todo:

https://www.libertaddigital.com/temas/sesion-de-control-al-gobierno/

La Partitocracia, en fin, ha gangrenado a nuestra España, la ha dividido y la ha transformado en un país débil ¿Qué futuro nos espera frente a las nubes negras económicas de la postpandemia? Los tradicionalistas nunca debemos abandonar la esperanza de que el futuro será nuestro, aunque ahora no pueda verse el camino.

Cristo y la Virgen María están con nosotros.

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