Thomas Petersen, empleado del Instituto Allensbach de Demoscopia, escribe en un artículo publicado hoy en el “Frankfurter Allgemeine Zeitung” que la Navidad de este año “probablemente será la última” “cuando los cristianos en Alemania sean mayoría”. «Una erosión del cristianismo en Alemania» se ha observado durante «décadas», «que avanza lenta pero persistentemente» y está provocando un «cambio fundamental en la sociedad».1
Las encuestas realizadas por su instituto confirman este proceso de erosión, que se acelera en lugar de desacelerarse. “Debería ser más cuestión de meses que de años antes de que el número de miembros de la iglesia caiga por debajo del umbral del 50 por ciento”.
- La causa de este desarrollo es «una erosión de la fe cristiana que es mucho mayor que la disminución del número de miembros de la iglesia. Incluso entre los miembros restantes de la iglesia, «la fe cristiana está profundamente anclada en unos pocos». Sólo el nueve por ciento de la población total se describió a sí misma como cristianos devotos (seis por ciento católicos, tres por ciento protestantes).
- Cuando se les preguntó acerca de creencias específicas, una mayoría del 52 por ciento ahora cree que «todo en la naturaleza tiene un alma, incluidos los animales y las plantas». Esto es «una indicación de que el movimiento ecologista, que contiene muchos elementos religiosos, es actualmente probablemente el competidor más importante de las iglesias cristianas». Sin embargo, solo una minoría del 46 por ciento cree en Dios y el 37 por ciento cree que Jesucristo es el Hijo de Dios.
En «un cierto contraste con estos números», sin embargo, estaría «el resultado de preguntas que tratan de la apreciación de la tradición cultural cristiana». Una gran mayoría de alemanes continúa asociando el cristianismo con Alemania a nivel cultural:
- Actualmente, el 70 por ciento de los encuestados está de acuerdo con la afirmación de que el cristianismo pertenece a Alemania. Una mayoría del 55 por ciento también está de acuerdo con los no confesionales.
- Sin embargo, solo el 17 por ciento de los encuestados estuvo de acuerdo con la afirmación de que el Islam pertenece a Alemania, mientras que el 64 por ciento no estuvo de acuerdo con ella. Estos valores se han mantenido estables durante diez años.
- La afirmación de la importancia de una educación religiosa de los niños también se ha mantenido estable desde 1995 en un 43 por ciento. Esto también se aplica a la afirmación de los valores cristianos, que el 44 por ciento sigue considerando importantes.
Las cifras disponibles indican que “la erosión del cristianismo se produce en tres etapas”:
“Primero la gente pierde la fe en los contenidos esenciales del cristianismo. Este proceso está ahora muy avanzado, solo una minoría todavía profesa el contenido central de la enseñanza cristiana, y solo uno de cada diez siente que está estrechamente relacionado con una de las iglesias cristianas. Solo después de este alejamiento interior deja la iglesia en un segundo paso. […] El tercer paso es alejarse de la tradición cultural cristiana, pero esta seguirá siendo cultivada y valorada durante al menos un cierto período de tiempo, incluso sin una base religiosa «.
Las encuestas mostraron, sin embargo, que la tradición cristiana en Alemania también se está erosionando lentamente. En forma de villancicos, por ejemplo, esta tradición “al menos en cierta medida también la llevan a cabo aquellos que ya no pueden hacer mucho con la fe misma”.
Antecedentes y evaluación
Petersen explica que la pérdida de la fe está al comienzo del proceso de erosión que describe, pero no profundiza en esto. Otros estudios confirman esta observación y al mismo tiempo afirman que no todas las corrientes de la Iglesia se ven igualmente afectadas por este proceso. Si bien las corrientes teológicamente liberales en particular están literalmente desapareciendo en toda el área cultural de Europa occidental, esto no se aplica a las corrientes conservadoras y tradicionales (que, sin embargo, son significativamente más débiles en número).
- Según George Weigel, “toda la esterilidad del catolicismo progresista” se manifiesta en su “incapacidad para transmitir la fe a las generaciones siguientes, así como en la resultante“ deforestación religiosa en Europa Occidental ”. La “parte de la iglesia mundial que asumió el proyecto progresista con el mayor entusiasmo” ha demostrado ser la menos resistente a la presión de disolverse en los tiempos modernos.2
- Según el sociólogo de la religión Stephen Bullivant, la pérdida de los marcadores de identidad en el catolicismo tras el Concilio Vaticano II fue una de las causas del debilitamiento de los lazos religiosos en muchas sociedades occidentales, lo que provocó el abandono de la religión. Los marcadores de identidad son características que distinguen a un grupo en una sociedad de otros y tienen un efecto de construcción de comunidad. El catolicismo posconciliar tendió a esforzarse por debilitar las diferencias con las sociedades que lo rodeaban para volverse más compatibles. Sin embargo, sobre todo, esto debilitó los lazos culturales y religiosos y la percepción de comunidad entre los católicos. Como resultado, los católicos bautizados se habrían distanciado de la Iglesia en gran número y ya no pasarían la religión a sus hijos.3
- Los demógrafos observan que las religiones asociadas con una visión conservadora de la familia son evolutivamente superiores a otras religiones y visiones del mundo. Las familias que siguen estas religiones tienden a ser más estables, tienden a tener más hijos que otras y transmiten esta religión a sus hijos. Su rechazo al divorcio, el aborto o la homosexualidad también contribuye a un mayor número de hijos entre los seguidores de estas religiones. Es «plausible que, desde un punto de vista evolutivo, hayan prevalecido religiones con tales valores familiares».4 De hecho, existe una «conexión sorprendentemente clara entre el grado de religiosidad y el número de niños en casi todos los países europeos».5
En consecuencia, la observación sugiere que las corrientes conservadoras y tradicionales del cristianismo no se ven afectadas por los procesos de erosión descritos por Petersen. Estudios realizados en Estados Unidos muestran, por ejemplo, que estas corrientes transmitirían la fe a las generaciones futuras con más éxito que las corrientes liberales. En general, hay vínculos religiosos más fuertes y más vocaciones sacerdotales en ellos.6 En Francia, el número de vocaciones sacerdotales fuera de los grupos tradicionalistas como las Fraternidades Pío y Pedro está disminuyendo, mientras que aumenta en estos grupos. En 2018, el 20 por ciento de los sacerdotes ordenados este año provenían de estos grupos. Si la tendencia continúa, es probable que los sacerdotes tradicionalistas constituyan la mayoría de los sacerdotesen Francia alrededor de 2040 porque hay cada vez menos nuevas vocaciones en otras corrientes.
Históricamente hablando, las corrientes liberales en el cristianismo representan un fenómeno joven que solo podría surgir en las condiciones de prosperidad general y reconocimiento social general del cristianismo. Es probable que estas corrientes solo puedan sobrevivir temporalmente en estas condiciones históricas excepcionales hasta que se erosionen en el curso de los procesos descritos anteriormente. Particularmente en entornos en los que el cristianismo está bajo presión o donde ya no hay consenso social, los débiles lazos religiosos típicos de las corrientes liberales apenas son sostenibles. Se puede suponer que los cristianos liberales se asimilarán cada vez más a la cultura circundante bajo la creciente presión de su entorno. Los cristianos fieles no solo aceptan la inevitable tensión entre el cristianismo y el mundo circundante, sino que la afirman.
Este artículo se publicó originalmente en alemán en renovatio.org
Fuentes
- Thomas Petersen: “Cultura cristiana sin cristianos”, Frankfurter Allgemeine Zeitung , 22 de diciembre de 2021, p. 8.
- George Weigel: La renovación de la Iglesia: reforma profunda en el siglo XXI , Illertissen 2015, p. 36.
- Stephen Bullivant: éxodo masivo. Desafiliación católica en Gran Bretaña y Estados Unidos desde el Vaticano II , Oxford 2019.
- Steffen Kröhnert / Reiner Klingholz: “Fe, poder e hijos. ¿Las personas religiosas con muchos descendientes conquistan el mundo? ”, Instituto de Población y Desarrollo de Berlín, Documento de debate 3 (2010), pág. 5.
- Steffen Kröhnert / Reiner Klingholz: “Fe, poder e hijos. ¿Las personas religiosas con muchos descendientes conquistan el mundo? ”, Instituto de Población y Desarrollo de Berlín, Documento de debate 3 (2010), p. 13.
- Roger Finke / Rodney Stark: The Churching of America, 1776-2005: Ganadores y perdedores en nuestra economía religiosa , New Brunswick 2011, S. 269.
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