Se asoma Colombia al año 2022 en medio del más desolador panorama y con la expectativa del tenebroso futuro que le espera en los comicios electorales que se avecinan.
Todo está servido para que nuestro país, que tantas vicisitudes ha superado, caiga en las garras del totalitarismo y la miseria de la mano del socialismo del siglo XXI , que no es otra cosa, que el mismo comunismo de siempre: la ideología que más crímenes y miseria ha generado en el mundo.
A los hechos me remito:
Nuestra democracia resistió durante 50 años la violencia y el terrorismo de las guerrillas comunistas, pero el rechazo del pueblo colombiano los convenció de que la subversión armada no era el mejor el camino para tomarse el poder.
Dirigieron su acción a lo que ahora llaman la “revolución cultural”: Tomaron el control de las organizaciones sindicales; se infiltraron en la educación, desde la primaria hasta la universitaria, para indoctrinar a la niñez y a la juventud en las falacias de la revolución marxista; se tomaron por asalto la administración de justicia, donde ahora sus simpatizantes se encargan de repartir impunidad a manos llenas a narcoguerrilleros y vándalos, mientras persiguen a militares y dirigentes que no comparten su proyecto político; chantajean a los timoratos gobernantes “de centro” para alterar a su antojo el orden público; se confabularon con los curas de la “teología de la liberación” , con los comunicadores que egresan de las universidades con el cerebro “lavado” y con los idiotas útiles del “marxismo caviar” para penetrar con su veneno a la sociedad colombiana.
Han contado para sus protervos planes con los inagotables recursos del narcoterrorismo, explotador de los negocios más lucrativos del planeta: el tráfico de estupefacientes, el secuestro , la extorsión y la minería ilegal. Ningún candidato puede contar ni en sueños con una financiación parecida.
Como si lo anterior fuera poco, el proyecto de la izquierda colombiana, representada por el ex guerillero del M-19 Gustavo Petro, ya dejó de ser una confrontación local pues el movimiento de la Izquierda Internacional, violando nuestra soberanía, participa activamente en la campaña para elegir al próximo Presidente de los colombianos. Como lo aprobó el Foro de Sao Paulo, Colombia es para la izquierda latinoamericana la joya de la corona y no descansarán hasta tomársela.
Vivimos un marco de ilegalidad, donde no se respeta ni la Democracia ni el Estado de Derecho, en virtud del asalto cometido en el plebiscito de 2016 contra la voluntad popular que rechazó el llamado “acuerdo de paz “ con las Farc.
Los poderes públicos se han confabulado para mantener vigente ese acuerdo espurio, que el Presidente Santos no podía firmar ni el Presidente Duque estaba obligado a implementar. Pero hay que mantenerlo para dar gusto a la izquierda, que cuenta con el aval de Biden, la ONU y otras instancias sometidas al comunismo.
Tampoco se puede combatir el narcotráfico con el método que en el pasado resultó más eficaz, la fumigación aérea, porque no podemos privar a la izquierda de su mayor recurso financiero.
Mientras esto ocurre, unos cuantos candidatos “de centro” se disputan lo que queda del electorado democrático. Obnubilados por sus personales aspiraciones, callan frente a los grandes problemas del país : La falta de legalidad, la impunidad , el imperio de la coca, la corrupción, la pobreza, el desempleo, la destrucción de la institución familiar, la inseguridad en campos y centros urbanos, la amenaza del Foro de Sao Paulo, y ahora, la inflación.
Aún así, sin líderes que encarnen las verdaderas soluciones que Colombia requiere, tendremos que votar para evitar el desastre de caer en el abismo de un régimen totalitario y marxista como el que Petro propone. Aunque no se vislumbre todavía el capitán que ponga a flote este barco, busquemos a quien más se acerque al camino de reconstruir el país , no a aquellos que preconizan las mediocres, oportunistas y débiles propuestas “de centro”. Civilización o barbarie es el dilema .
COMPARTE:
EMBÁRCATE EN LA LUCHA CONTRARREVOLUCIONARIA: Si quieres defender la cristiandad y la hispanidad, envíanos tus artículos comentando la actualidad de tu país hispano, o colaboraciones sobre la fe católica y la cultura, así como reseñas de libros, artículos de opinión… Ya superamos las 12.000.000 de páginas vistas anualmente en todo el mundo, únete a nuestro equipo de voluntarios y difunde la verdad compartiendo en redes sociales, o remitiendo tus colaboraciones a redaccion@tradicionviva.es . Puedes seguirnos en Telegram: t.me/tradicionviva / Facebook: @editorial.tradicionalista / Twitter: @Tradicion_Viva / Youtube: youtube.com/c/tradicionvivaTv / Suscríbete a nuestro boletín digital gratuito, pulsa aquí.
TE NECESITAMOS: Somos un espacio de análisis lejos de los dogmas de la corrección política; puedes colaborar haciendo una DONACIÓN (pulsando aquí)