Redacción y edición: Carlos para https://gnews.org/

Cuando el gobierno Comunista de China trató de presentar ante el mundo con 0 contagio de Ómicron en China permitiendo la realización de  los Juegos Olímpicos de invierno en Beijing hasta hoy la realidad ha traído muchas dudas e inconformidades por los atletas internacionales congregados en Beijing.  Hoy el Partido Comunista de China está muy ocupado enfrentándose con otros dos sucesos que son verdaderas papas calientes ante la comunidad internacional:  la mujer secuestrada, vendida, violada y encadenada durante 24 años, quien además dio luz a 8 hijos en un pueblito de Xuzhou, de la provincia de Jiangsu, y otra mujer americana traicionada a su nacionalidad por nacimiento y se compitió en los Juegos Olímpicos registrándose como atleta de China. 

El primer caso se trata de la oscura realidad de la falta de mujeres para la población en las aldeas de China que están tupidos de varones sin mujer para casarse. Esto es la inevitable consecuencia del control de natalidad y aborto irrestricto promovido por el PCCh durante varias décadas.  De este mal se deriva otro mal que ha sido un negocio multimillonario en China para vender mujeres con el consentimiento de las autoridades de todos los niveles en China.  Varones en las aldeas compran mujeres de manos de los traficantes es un secreto público.  Pero, el PCCh es tan hábil que ha dejado la población con el cerebro bien lavado aceptando esta cruda realidad como algo normal y legítimo, que hasta certificado de matrimonio lo han podido extenderse a quienes lo soliciten.   La revelación de esta pobre mujer encadenada durante 24 años con los dientes arrancados por el malvado “marido” es hoy una noticia que el pueblo chino está pidiendo la verdad a gritos.  El gobierno central no tiene más remedio que crear comité para investigar a fondo.

El segundo caso es sobre la medallista Eileen Feng Gu quien vino a los Juegos Olímpicos con la bandera del PCCh, cuando en realidad ella tiene la nacionalidad americana.  El gobierno del PCCh ha utilizado en estos juegos muchos atletas extranjeros como esta  muchacha que fueron comprados con jugosas recompensas económicas para disfrazarse de atletas chinos para obtener las medallas de oro.  Este hecho ha destapado también la colusión del Comité Olímpico Internacional con el PCCh permitiendo una irregularidad cómo ésta.  Esto es verdaderamente un hecho vergonzoso que el COI ha traicionado  por completo el espíritu olímpico.

Por sostener la celebración de estos Juegos Olímpicos de invierno el PCCh ha gastado una gran fortuna para sostener con el único propósito que es demostrar al mundo la grandeza de China.  Por el otro lado, estos Juegos Olímpicos sirven para que Xi Jinping llegue  a la 20ª sesión del partido comunista en Octubre de este año, para demostrar al Comité central del partido que él es capaz de crear la grandeza de la nación, y que esta lucha feroz le reditúe para consolidar su poder convirtiéndose  en un líder vitalicio de China.

Con estos dos casos vergonzosos:  el primero con una mujer colgada una cadena durante 24 años viviendo como un animal, y la otra mujer colgada otra cadena de medalla de oro para gloriar el PCCh, Xi Jinping tiene que explicar al mundo por qué el PCCh es capaz y con qué derecho a cometerse a tantas atrocidades dejando el derecho humano en un completo abandono.  Y lo peor es que organizaciones internacionales como el Comité Olímpico Internacional y las Naciones Unidas que están tan coludidas con el PCCh que han perdido la capacidad de denunciar el PCCh por el pisoteo de derechos humanos en China. 

El PCCh esclaviza el pueblo chino, encima usa el dinero para sobornar a los gobiernos extranjeros y las autoridades de los organismos internacionales pretendiéndose  como un gobierno bueno y hábil cuando en realidad no lo es.  Los dos casos mencionados aquí no pueden ser considerados como incidentes, si no, son la verdadera maldad del PCCh.  Parece que el pueblo en China está despierto esta vez exigiendo que el gobierno esclarezca este caso de la mujer encadenada viviendo como animal en un cuarto oscuro, húmedo y sucio. Preguntamos que por la justicia el COI sea capaz de esclarecer el hecho de que una atleta pueda competir en nombre de China cuando no es ni siquiera la ciudadana de este país?   ¿Para cuándo el PCCh dejaría de pisotear el derecho humano en China?

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