La Corte Constitucional consagra la pena de muerte en Colombia exclusivamente en contra de los bebés en gestación no deseados (Manifiesto de Alianza Reconstrucción Colombia)

Si existe algún derecho ligado indisolublemente a la naturaleza humana, a la ley natural y al orden universal, ése es el derecho a la vida. No en vano está consagrado en la ley divina, 5º. Mandamiento: “No matarás”

Cercenar una vida es matar, como lo ha dispuesto la Corte Constitucional al convertir un atroz delito, cercenar la vida de inocentes criaturas que “viven” en el seno materno, dizque en un derecho protegido y promovido por el Estado.

Se ha establecido la pena de muerte pero no para los más crueles criminales, pues a éstos la Corte los premió con curules gratuitas en el Congreso cuando desconoció la voluntad del pueblo soberano que rechazó en el plebiscito de 2016 el perverso acuerdo Santos- Timochenko. Cinco magistrados han decretado la muerte de millones de seres humanos  inocentes, que carecen de voz para defenderse. Cargarán con la responsabilidad por la ejecución del mayor genocidio en nuestra historia.  

Abandonó una vez más, esta prevaricadora Corte, su deber de salvaguardar la Constitución que claramente establece en el artículo 11 : “El derecho a la vida es inviolable”.

Con fundamento en los valores judeocristianos fundacionales de la Civilización Occidental, se ha consagrado el derecho a la vida desde el momento de su concepción, como lo reconoció nuestra Corte Suprema y se incluyó en la Convención Americana de Derechos Humanos, aprobada por el Congreso de Colombia en 1972.

Nada valen para esta Corte, influenciada por las tesis materialistas del Nuevo Orden Mundial, la Jurisprudencia, ni los Tratados Internacionales con valor constitucional, ni los principios y valores que hacen parte de nuestra nacionalidad y que mayoritariamente profesa el pueblo colombiano, como lo evidencian las encuestas de opinión.

Ha perdido esta Corte toda legitimidad y sólo basta expedir su certificado de defunción. Ante el silencio cómplice del Gobierno y del Congreso y la falta de propuestas de los candidatos presidenciales, corresponde al pueblo ejercer su libertad y demandar por la vía del referendo un revolcón a fondo de este abyecto y corrompido aparato judicial.

Asimismo, restablecer – por encima de las leguleyadas de esta dictatorial Corte –  el derecho a la vida para los inocentes seres humanos que acaban de ser condenados a muerte  de manera ignominiosa.

ALIANZA RECONSTRUCCIÓN COLOMBIA hace un llamado a las gentes de bien, a quienes creemos en los valores esenciales de la dignidad humana y de la libertad, para que, desde ahora, sin importar los resultados electorales, nos unamos para devolver a Colombia el derecho a la Justicia, a la Legalidad y a la Vida desde la concepción hasta la muerte natural, que nos fueron arrebatados por los enemigos del orden inspirado en la concepción cristiana de la Vida.

ALIANZA RECONSTRUCCIÓN COLOMBIA

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Luis Alfonso García Carmona, Presidente

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