Análisis escrito por Dr. Joseph Mercola

En esta entrevista, hablaremos sobre los pasaportes de vacunación con Nick Corbishley, quien escribió el libro titulado “Scanned: Why Vaccine Passports and Digital IDs Will Mean the End of Privacy and Personal Freedom”.

En mi opinión, no hay duda de que el principal objetivo de las vacunas antiCOVID no fue por la salud pública, sino para justificar los pasaportes de vacunación, que a su vez solo son la primera versión de un mecanismo que desea vigilar, rastrear, manipular y controlar a toda la población.

Corbishley es un periodista que durante la última década escribió sobre temas de política, finanzas y privacidad. Reside en Barcelona, España y ha contribuido en dos blogs de Estados Unidos desde 2013.

“Israel fue el primer país democrático que creó identificaciones digitales, en febrero de 2021, y cuando comencé a analizar lo que sucedía me preocupé mucho”, dice Corbishley. “Escribí un artículo en abril de 2021, en el cual expresé mis preocupaciones sobre los riesgos que involucran estos pasaportes de vacunación.

Luego comencé a analizar lo que sucedía en Europa, después en Italia y por último en Francia, cuando se lanzó el llamado Green Pass en junio. El cuál era un documento que se suponía que se crearía para permitir viajar entre países de Europa.

Pero se empezó a utilizar muy rápido para controlar el acceso a los servicios públicos y a lugares públicos dentro del propio país. Justo ahí empezamos a ver restricciones que nunca antes habíamos visto.

Así que comencé a escribir más hasta que esto llamó la atención de la editorial con sede en Vermont, Chelsea Green. Tuvimos algunas conversaciones y decidimos que era una buena oportunidad de escribir sobre algo que todas las personas deberían saber. Incluso en esta etapa. Ya que no se habla de eso tanto como debería”.

Las dos preocupaciones más importantes

Una de las principales preocupaciones sobre los pasaportes de vacunación se relaciona con la privacidad. Si se implementan, nos quitarán casi toda la privacidad a la que estamos acostumbrados. Es muy claro que son un precursor de la identidad digital y de un tipo de aparato de vigilancia digital mucho más invasivo.

“Los pasaportes funcionan como una puerta de entrada para permitir que el gobierno nos lleve a una nueva realidad donde rastrean y vigilan todas nuestras acciones, movimientos, pensamientos y comportamientos”, dice Corbishley.

Pero no se trata sólo de vigilancia. También se trata de obligar el cumplimiento, y esa es la segunda preocupación.

“Si aprendimos algo sobre el pasaporte de vacunación, es que trata de cambiar la forma en que nos relacionamos con el gobierno, al igual que la forma en que el gobierno se relaciona con nosotros, los gobernados.

Si en el futuro no hace lo que dice el gobierno, ya sea recibir una o varias vacunas en su brazo o dónde sea, lo desactivarán. No podrá acceder a los servicios más básicos, ni al tipo de lugares que necesitamos para poder participar en la sociedad y la economía”.

Vigilancia

Es obvio que nos han vigilado desde hace muchos años. Todas las tecnologías relacionadas con Google son tecnologías de seguimiento y vigilancia. Nuestros teléfonos celulares nos rastrean y vigilan. Lo mismo ocurre con Facebook y otras plataformas de redes sociales. Todos recopilan información personal y controlan hasta nuestro parpadeo.

También sabemos que estas tecnologías sirven para influir y manipular los pensamientos, las creencias y el comportamiento de las personas. Sin embargo, hasta ahora, toda esa manipulación ha sido secreta. Pero el sistema que está en desarrollo es único y nuevo en el sentido de que el cumplimiento obligatorio será, en muchos casos, manifiesto, flagrante e indiscutible, ya que el castigo se relacionará con cosas como sus finanzas personales y privilegios de viaje.

Es obvio que el pasaporte de vacunación es una plataforma a la que pueden agregar monedas digitales emitidas por un banco central (CBDCs, por sus siglas en inglés). Entonces, como ejemplo, el gobierno podría publicar una narrativa política, y si no está de acuerdo, tendrán acceso a su cuenta bancaria o a sus privilegios de viaje. Y hasta a su solicitud de préstamo.

Gracias a los hogares inteligentes basados en la tecnología de Google, es posible pensar que en un futuro podría estar encerrado dentro de su hogar si lo etiquetan como un opositor o podrían negarle el acceso a su casa. Es más, hasta podrían cortar sus servicios públicos.

Las posibilidades para castigar a los opositores son infinitas cuando cada cosa es identificable de manera digital, rastreable y está conectado de forma inalámbrica. Solo es necesario pulsar una tecla para terminar con la vida de alguien y dejarlo indefenso y sin hogar.

Lo más probable es que ni siquiera pueda recurrir a una persona viva con la que pueda reportar sus quejas. Gran parte del sistema estará a cargo de la inteligencia artificial y de varios algoritmos. Es importante comprender que, si aceptamos los pasaportes de vacunas, significa que damos nuestro consentimiento a todo lo que viene después, advierte Corbishley. Aceptamos que éste sea nuestro futuro.

Por qué debemos rechazar las identificaciones y monedas digitales

También debemos permanecer alerta ante el lanzamiento de otros mecanismos de control peligrosos como los pasaportes de vacunación, en especial las identificaciones digitales y las CBDCs, pero también ante cualquier cantidad de otros controles digitales y biométricos. Como explica Corbishley:

“En este momento, el primer ministro de Ontario en Canadá, dice que va a retirar los pasaportes de vacunación. La provincia de Alberta dice que también va a retirar los pasaportes de vacunación.

Este es el mensaje que recibimos de todo el mundo occidental. ‘Es hora de dar un paso atrás. Vamos a dejarlo vivir su vida. Vamos a permitir que vuelva algún tipo de normalidad’.

Escandinavia dice que eliminará por completo los pasaportes de vacunación. Es interesante ver que algunos países usan ese lema. Pero creo que hay que tener mucho cuidado, porque mientras hablan de hacer esto, dan paso a sistemas de identidad digital, que serán a una escala mucho mayor que los pasaportes de vacunación.

Ya que estos sistemas crean una identidad digital que no solo permitirá el control de su estado de vacunación, sino también el control de sus registros de impuestos y de sus registros de empleo. También incluirán su estado de vacunación. Así que eso es demasiado tramposo. Creo que engañan a sus poblaciones de una manera muy oscura.

Todas estas cosas ya suceden, pero es probable que el último paso sean las monedas digitales emitidas por un banco central, las cuáles se incorporarán en los próximos tres a cinco años.

El presidente del Banco de Pagos Internacionales, Agustín Carstens, quien fue presidente del Banco de México, dijo de manera abierta que lo maravilloso de las monedas digitales emitidas por un banco central es que les permite rastrear todo lo que cada persona hace.

Lo que no dijo es que también les permite desactivar una cuenta. Les permite impedir a las personas que puedan realizar transacciones. No llegaron tan lejos. Pero lo que sí dijo es que esto es muy diferente al dinero en efectivo. Por esa razón, las personas no se dan cuenta de cómo se construye esta red de control, pero es necesario que empiecen a prestar atención antes de que sea demasiado tarde”.

Construyen un sistema de crédito social

A estas alturas, muchas personas están familiarizadas con el sistema de crédito social en China, o al menos han oído hablar de él. ¿Cómo se compara o relaciona este sistema con los pasaportes de vacunación y las identificaciones digitales?

“Creo que el sistema de crédito social en China hasta cierto punto es un modelo a seguir. Ya que es probable que los gobiernos se encaminen a él. Les gustaría poder usar las nuevas tecnologías que tenemos para obligar a las personas a realizar los tipos correctos de comportamientos sin tener que utilizar castigos más obvios.

Puede recompensar a las personas por hacer las cosas correctas, o puede darles un pequeño castigo digital de vez en cuando si hacen las cosas incorrectas. Creo que ahí es donde China lidera el camino.

De manera irónica, en la investigación que realicé para escribir mi libro, descubrí que, aunque las ambiciones de China con el sistema de crédito social son ilimitadas (quieren un control total), todavía no lo han logrado. Ya que aún realizan muchos planes piloto. Por lo tanto, la medida a la que esté expuesto en este tipo de sistema.

Pero el modelo está ahí. También existen empresas como Ant Financial y Tencent. Estos son los equivalentes de Google y Facebook, que ejecutan sus propios esquemas de créditos sociales dentro de su pequeño universo. Como puede darse cuenta, China se encuentra en una situación muy compleja. No es tan completa como algunas personas podrían creer, pero la intención y la ambición es enorme.

En definitiva, diría que podemos ver ejemplos de este comienzo en el Occidente. Ya podemos ver que los bancos hablan sobre el uso de nuestro comportamiento en las redes sociales para determinar nuestro puntaje crediticio, que es muy similar a lo que hacen en China. Es evidente que existen los medios y un deseo de avanzar en esa dirección”.

La unidad es el desafío de nuestra vida

El desafío al que nos enfrentamos ahora es que, para poder evitar esta red de control, necesitamos estar unidos. El problema es que muchas personas no son capaces de ver estos peligros. La mayoría de las personas menores de 30 años están acostumbradas a hacer casi todo en sus teléfonos, y la conveniencia de las identificaciones digitales y de la banca digital es atractiva.

Las Organizaciones como el Foro Económico Mundial y muchos de los bancos centrales que impulsan el lanzamiento de esta red de control también pueden hacer que sea imposible o casi imposible vivir sin una identificación digital y sin las CBDCs. Ya vimos que existen algunos líderes que dicen que su objetivo es hacer la vida lo más difícil e inconveniente posible para cualquier persona que no cuente con su pasaporte de vacunación. Y lo más probable es que harán lo mismo con las identificaciones digitales y las CBDCs.

“Uno de los mejores ejemplos es Italia”, dice Corbishley. “Si quiere ver un país que inició con la sexta marcha con los pasaportes de vacunación, ese es Italia. Ya les dijeron a las personas: ‘Si no cuenta con este documento, no puede trabajar. No puede subirse a un autobús ni cruzar la ciudad. Tampoco se puede subir al metro. Ni puede acceder a locales comerciales que no sean supermercados, farmacias, gasolineras y tiendas de mascotas.’

Literal les quitaron y redujeron todas las oportunidades hasta que la mayoría dijo: ‘Está bien, hagámoslo’. No tengo alternativa. No voy a sobrevivir de esta manera’.

Si tiene una hipoteca, sus finanzas ya están ajustadas y de pronto su gobierno le dice que no podrá trabajar, la mayoría de las personas se vienen abajo y tiene que acceder.

Un periodista en Canadá hablaba de los transportistas del Freedom Convoy. Decía: ‘Estos muchachos no representan a los canadienses; el 90 % de los canadienses se han vacunado y todos están contentos con las restricciones y los mandatos. Pero ¿cómo sabe cuántas personas de ese 90 % se vacunaron porque no tenían otra opción? Fue un argumento muy falso”.

Cómo prepararse para lo inevitable

Aunque la situación es desoladora y grave, Corbishley no cree que los pasaportes de vacunación, las identificaciones digitales y las CBDCs sean inevitables. “Creo que estamos en medio de una gran batalla”, dice.

Creo que se creará una comunidad y sociedad paralela, donde las personas puedan funcionar. Vemos señales de que existe de nuevo el trueque dentro de una comunidad como esa en Italia. Sobreviven como pueden, y nos referimos a millones de personas que no se han dado por vencidas. Ya que todavía no han cedido. ~Nick Corbishley

La pregunta es ¿cómo podemos ganar cuando todas las cartas parecen estar en nuestra contra?

“Creo que lo primero que debemos hacer es informar a la mayor cantidad de personas posible. Por eso escribí el libro. Escribí el libro con la esperanza de llegar a personas que tal vez ya se vacunaron, pero que comenzaron a tener ciertas dudas y estaban indecisas.

Quiero decir, conozco a muchas personas que ya recibieron las primeras dos dosis, pero que no saben si recibir una tercera. Conozco a muchas personas que ya recibieron dos dosis, se contagiaron con la variante Ómicron y ahora piensan: ‘¿Por qué debo recibir una tercera dosis?’ Muchas personas empiezan a cuestionar eso.

Creo que estamos en medio de lo que solo puede describirse como una batalla existencial. Si perdemos esta batalla, puede ser muy difícil como individuos protegernos, ya que el grado de control que tendrán sobre nosotros será enorme.

Creo que se creará una comunidad y sociedad paralela, donde las personas puedan funcionar. Vemos señales de que existe de nuevo el trueque dentro de una comunidad como esa en Italia. Sobreviven como pueden, y nos referimos a millones de personas que no se han dado por vencidas. Ya que todavía no han cedido.

Eso me da un poco de esperanza. Creo que el hecho de que las personas se hayan cansado de las restricciones significa que el gobierno tiene que reconsiderar la situación, pero al mismo tiempo impulsan las identificaciones digitales.

Esto es lo que las personas deben entender. Cuando la mayoría de los países dicen: ‘Vamos a olvidarnos de los pasaportes de vacunas’, creo que precisamente significa eso. En el Reino Unido, no han hecho eso. Ya que solo sustituyeron el pasaporte de vacunación obligatorio a un pasaporte de vacunación voluntario.

Utiliza los pasaportes de vacunación para viajes internacionales. Por ejemplo, si es británico y quiere viajar a Europa continental, pero no tiene su pasaporte de vacunación, no podrá entrar al continente. Sucede lo mismo si es europeo y quiere ir a los Estados Unidos.

Debido a que suceden tantas cosas, es muy difícil hacer un seguimiento. Eso solo ocurre con alguien que pasa la mayor parte de su día tratando de hacer un seguimiento de estas cosas. Si usted es alguien que trabaja de 9 a 5, llega a casa y tiene tres hijos que cuidar, será mucho más difícil mantenerse al tanto de estos desarrollos.

Tengo la esperanza de que no hayan ganado todavía. Pero ya tienen mucho poder. Y nos referimos a organizaciones como el Foro Económico Mundial, que representa a cientos de las empresas más poderosas del planeta. Al igual que a los gobiernos más poderosos del planeta.

Entonces, será una gran batalla y por desgracia ellos tienen la mayoría de las ventajas. Pero creo que todo lo que ocurre en Canadá nos demuestra que aún se puede formar una resistencia. Y creo que la resistencia crece en Alemania. Y también en Austria. El gobierno comienza a tener dudas sobre el mandato de vacunación”.

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Se espera un colapso económico

También es necesario considerar los crecientes riesgos económicos a nivel mundial. Los bancos centrales de todo el mundo se encuentran acorralados y no pueden salir. Es casi seguro que nos enfrentaremos a otra crisis financiera. Sólo es cuestión de tiempo.

Ya existe evidencia de que nos encontramos en las primeras etapas del colapso económico, y ese es un problema paralelo que se debe tener en cuenta al intentar predecir lo que podría suceder con las identificaciones digitales y las CBDCs, ya que todas están conectadas. Para prepararse para un colapso económico inevitable, le sugeriría centrarse en mejorar su resiliencia a nivel local.

Por ejemplo, asegúrese de tener acceso a suministros de agua que no sean solo de la llave, cultive sus propios alimentos y relaciónese con otros productores y agricultores locales para construir su seguridad alimentaria.

Estas son cosas muy básicas que pueden salvarle la vida cuando todo se derrumbe y su dólar o euro se vuelvan aptas para usar como papel higiénico. Tener comida, agua, refugio y comunidad lo hace mucho más resistente a la tiranía, ya que, si no tiene estas cosas, necesitará que el gobierno se las proporcione.

“Creo que la comunidad es esencial”, dice Corbishley. “Contar con personas que tienen una mentalidad y cosmovisión similar, significa que tiene alguien con quien contar.

La resiliencia será muy difícil. Como resultado de los confinamientos, las pequeñas empresas se encuentran en una situación grave. Tuvieron que asumir muchas deudas solo para sobrellevar los confinamientos. No hay duda de que las grandes empresas tienen un acceso mucho más fácil a una deuda que las pequeñas empresas.

Esto es una pena, ya que las pequeñas empresas son un pilar fundamental de la comunidad. Son una parte fundamental de la economía global y, lo que es más importante, las pequeñas empresas están dirigidas por personas independientes. Si las pequeñas empresas empiezan a desaparecer, veremos menos independencia y más dependencia. Y esa es un área que me preocupa demasiado.

Creo que lo más importante y lo más difícil es mantener la humanidad. En mi opinión, eso es fundamental, y por eso contar con una comunidad que lo aprecia es esencial para sobrevivir a esto. No creo que pueda estar en una isla y superar lo que viene.

También le recomiendo que, si tiene dinero e inversiones, trate de diversificar tanto como sea posible; ya que tal vez no sea bueno tener todo su dinero en un banco y en especial no en un solo banco.

Si analiza a países como México, que pasó por la Crisis del Tequila en la década de los 90, o Brasil, que enfrentó la enorme hiperinflación, ¿cómo sobrevivieron? Cuando posee activos reales, posee propiedades. Tal vez tiene metales preciosos. En Turquía, la inflación aumenta, las personas utilizan oro y buscan las criptomonedas. Hacen cualquier cosa excepto mantener su dinero en liras turcas”.

Información adicional

Para terminar, lo mejor que puede hacer en este momento es informarse sobre el inminente control digital, compartir información, resistir y oponerse a todos y cada uno de los intentos de implementar pasaportes de vacunación o identificaciones digitales, defender la libertad, construir una comunidad, prepararse para el deterioro de las condiciones económicas y diversificar su dinero e inversiones.

Descubra más información y asegúrese de obtener una copia del libro de Corbishley titulado: “Scanned: Why Vaccine Passports and Digital IDs Will Mean the End of Privacy and Personal Freedom”.

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