Que duda cabe que la música es uno de los mayores instrumentos para unir a los pueblos hispanos, y dentro de la música si hay un género que une de una forma especial y que hace vibrar todos los corazones, ese género es el bolero.
Muchos de nuestros jóvenes no conocen esa música que hizo vibrar de emoción a nuestros padres y abuelos, por eso desde Tradición Viva iniciamos una nueva serie de artículos con el fin de rescatar este género musical que cuenta con buenísimos ejemplos en todos los países hispanos.
El bolero surgió en la provincia española de Cuba a finales del siglo XIX, aunque sin duda alguna México es el mayor aportador a este género musical que es común a toda la hispanidad.
Hoy traemos uno de los grandes clásicos «Solamente una vez» compuesto por el genial mexicano Agustín Lara (1900-1970).
Sin duda alguna «Solamente una vez» es un bolero conocido por todos nuestros lectores, pero su historia no es tan conocida. Agustín Lara compuso este bolero para su amigo José Mojica (San Gabriel, Jalisco, 14 de septiembre de 1895 – Lima, 20 de septiembre de 1974), tenor mexicano que dejo su vida artística para seguir su vida terrenal como religioso franciscano (como Fray José de Guadalupe Mojica).
José Mojica, tras la muerte de su querida madre, reconsidero su vida, y decidió ser religioso. En 1941, y tras enterarse de su conversión, Agustín Lara compuso un bolero en el que describía la vocación de su amigo Mojica. Así nació uno de los boleros más universales «Solamente una vez» y aunque pudiera parecer que la letra hace mención al amor de una pareja, en realidad se refiere a la entrega del tenor y actor a su auténtica pasión religiosa.
Reproducimos una versión del bolero cantada por el también mexicano Luis Miguel.
Letra Solamente una vez , amé la vida Solamente una vez y nada más. Una vez nada más en mi pecho Brilló la esperanza, La esperanza que alumbra el camino De mí soledad. Una vez nada más se entrega el alma Con la dulce y total renunciación. Y, cuando ese milagro realiza El prodigio de amarse, Hay campanas de fiesta Que cantan en el corazón.