A pesar de lo que dice el feminismo radical la realidad se empeña en confirma lo evidente: no todas las mujeres son de fiar (igual que no todos los hombres son de fiar). En Palma la Policía Nacional se ha encontrado con otra «hermana» a la que no podemos creer.

En un nota de prensa difundida por la propia  Policía Nacional confirmar que el pasado viernes detuvieron una chica de 18 años de edad, como presunta autora de una simulación de delito de secuestro y agresión sexual, en Palma. Además de presunta delincuente la joven debe ser una incauta al fiarse de las campañas del feminismo radical y creer que la mentira femenina es siempre impune.

La joven denunció falsamente que un hombre la había metido a la fuerza en su vehículo, retenido a la fuerza durante dos días y haberla agredido sexualmente. La Policía Nacional ante dicha denuncia aplicó el protocolo y traslado a la joven a un centro hospitalario para comprobar la presunta agresión.

El contenido de la denuncia y su gravedad, puso en alerta a los investigadores de la Unidad de Atención a la Familia y a la Mujer que realizaron diversas gestiones para su esclarecimiento, averiguando finalmente que todo había sido una simulación para evitar que la familia de la joven se pudiera enfadar con ella por haber estado varios días fuera del domicilio.

Ante dicho simulación de delito la Policía Nacional procedió a detener a la joven como presunta autora de una simulación de delito aunque con posterioridad ha quedado en libertad con cargos.

En su comunicado la Policía recuerda la gravedad de inventarse la comisión de delitos, pues todo el tiempo empleado en la investigación de los mismos es tiempo no empleado en investigar los verdaderos delitos.

Todavía no hay comunicación de la Ministra de Igualdad pidiendo a sus «hermanas» que actúen con honestidad sin inventar delitos, y de paso aconsejando que no es conveniente estar dos días de diversión descontrolada sin avisar a la familia.

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