Según encuestas del Centro de Investigación Pew, 35% de adolescentes dice usar «casi constantemente» plataformas en línea como YouTube, TikTok, Instagram, Snapchat y Facebook. No obstante, algunos especialistas advierten de los efectos negativos del uso desmedido de las redes sociales en adolescentes. En particular, un estudio publicado en JAMA Pediatrics encontró que los cerebros de los adolescentes cambian su respuesta al mundo alrededor cuando hacen un mayor uso de estas plataformas.

Esta investigación es uno de los primeros estudios a largo plazo en la materia, según un comunicado de la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill. Según los hallazgos, los adolescentes que crecen revisando las redes sociales con más frecuencia se están volviendo hipersensibles a los comentarios de sus compañeros y a la retroalimentación social.

De acuerdo con María Maza, una de las autoras del estudio, «esta mayor sensibilidad a la retroalimentación social puede promover el uso compulsivo de las redes sociales en el futuro«. No obstante, también podría tratarse de un posible comportamiento adaptativo que «permitirá a los adolescentes navegar en un mundo cada vez más digital«, señala la estudiante de doctorado en psicología.

En este sentido, el estudio destaca el flujo constante e impredecible de la interacción social en forma de «me gusta«, comentarios, notificaciones y mensajes ofrecidos en las plataformas de redes sociales. El efecto a menudo gratificante de esta retroalimentación social convierte a estos estímulos en reforzadores especialmente poderosos, capaces de condicionar a los usuarios a revisar estas plataformas repetidamente. De esta forma, la investigación demuestra la importancia del control de los comportamientos en redes sociales para el desarrollo neuronal de los adolescentes.

Para el Instituto de la Mente Infantil, también existe cierta preocupación porque las redes sociales y los mensajes de texto aumente la ansiedad de los adolescentes y disminuyan su autoestima. Esto debido a posibles malentendidos relacionados con la falta de claves como el lenguaje corporal y las expresiones faciales. Igualmente, la apariencia de vidas perfectas, como suele proyectarse en redes sociales, impacta en a los adolescentes en este aspecto.

Estudios como este, que asocian un mayor uso de redes sociales con un impacto en el desarrollo neuronal adolescente, son especialmente relevantes en una época de creciente digitalización de la vida diaria. Junto con los señalamientos del Instituto de la Mente Infantil, se vuelven cruciales para una mejor comprensión de los beneficios y daños potenciales asociados al uso de la tecnología en la adolescencia. En este sentido, se recomienda a los padres prestar atención a esta actividad y establecer zonas libres de tecnología, así como horas libres de tecnología, donde se evite el uso de smartphones.

NotiPress/Jorge Cerino

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