(Gaudium Press) Diversos medios de información han dado cuenta de la singular estatua de bronce de alrededor de dos metros y medio, que ha sido puesta en lo alto del palacio de justicia del distrito Flatiron de Nueva York, y que muchos ya califican de un homenaje velado o no tanto a satán.

La estatua, que resalta también por su tono tirando a lo dorado, está colocada al lado de otras, una de Justiniano, que la Historia recuerda como el Justiniano el Legislador, gobernante cristiano que reinó en Constantinopla hasta el 527. También ahí se encuentra la estatua de Zoroastro el famoso filósofo iraní, que con sus ideas dio origen al zoroastrismo, religión que dominó la antigua Persia. Antes, en el lugar donde hoy se ubica la estatua abortista de cuernos y ramas en lugar de extremidades, había estado una de Mahoma, que fue retirada a mediados del siglo pasado, a pedido de colectivos musulmanes que decían que su religión prohibía representaciones del ‘profeta’.

Y ahora en lugar de Mahoma está ‘Now’ (Ahora), que ese es el nombre de esta estatua-mujer, que sí, su autora, la pakistaní Shahzi Sikander, presenta como un homenaje al aborto, y a la muerta jueza de la corte suprema Ruth Bader Ginsberg, promotora en sus fallos del aborto.

La escultora pakistaní de ‘Now’ se afirma como estudiosa de estilos clásicos e indo-persas, algunos de los cuales transforma dándoles inflexiones feministas modernas, y así sería con Now, que también quiere significar, según lo dice su autora, que es Ahora que se debe luchar en favor del aborto.

Deidades paganas, homenaje al aborto, cuernos y brazos que parecen serpientes, en fin, no les falta razón a quienes afirman que la escultura es fiel muestra de cierto tipo de arte que irrumpe sin velos y se va diseminando por diversos lugares públicos del mundo, exhalando sin vergüenza un misticismo hacia lo bajo, una espiritualidad con signo negativo. Con signo infernal.

En el momento en que en ciertos países se quiere prohibir cualquier manifestaciones religiosa en lugares públicos, el demonio sí quiere hacer válida ahí su supuesta ciudadanía.

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