El Euribor es un índice de referencia que se utiliza para calcular el tipo de interés de las hipotecas variables en la zona euro. El Euribor a 12 meses es el más utilizado, ya que es el que se utiliza para la mayoría de las hipotecas.

En 2023, el Euribor a 12 meses alcanzó su máximo histórico, situándose en el 4,10% en diciembre. Sin embargo, desde entonces ha ido descendiendo, situándose en el 3,68% a cierre de 2023.

Para 2024, las previsiones apuntan a que el Euribor a 12 meses continuará descendiendo. El panel de previsiones de Funcas estima que el Euribor a 12 meses se situará en una media del 3,51% en 2024. Por su parte, Bankinter, señala que el índice de referencia se situará en torno al 3,25% en 2024 y al 2,75% en 2025.

Las previsiones de descenso del Euribor se basan en una serie de factores, entre los que destacan:

• La disminución de la inflación en la zona euro.
• La ralentización del crecimiento económico en la zona euro.
• La relajación de las políticas monetarias de los bancos centrales.

Sin embargo, es importante señalar que las previsiones son solo eso, previsiones. El Euribor es un índice volátil, y su evolución puede verse afectada por una serie de factores imprevistos.

En el caso de que el Euribor descendiera más de lo previsto, podría suponer un alivio para los hogares con hipotecas variables. Sin embargo, también podría provocar un aumento de la inflación, ya que las empresas tendrían que aumentar sus precios para compensar el aumento de sus costes de financiación.

En definitiva, la evolución del Euribor en 2024 será un factor clave a tener en cuenta para los hogares con hipotecas variables.

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